En la banda izquierda desde Caparrós. El idilio de
Muniain
con la mediapunta no ha estado exento de accidentes. En abril de 2015 se lesiona en los ligamentos de la rodilla, en Sevilla, cuando Valverde venía apostando cuatro partidos atrás por su reubicación por dentro. Año y medio después, ya con
Ziganda
en el banquillo, vuelve a romperse la rodilla con la misma lesión. Apenas tuvo tiempo de asentarse con el técnico navarro. En tres años estuvo en el dique seco más de catorce meses.
Llegó
Berizzo
y parecía que Muniain recuperaba sensaciones por dentro. Fue todo un espejismo porque la apuesta del argentino fracasó, apenas aguantó hasta navidades. Con
Garitano
el camino ha sido relativamente largo.
Toda la segunda vuelta de la temporada pasada por la banda izquierda y unos cuantos partidos de la presente por la banda derecha. Cayendo al centro, pero desde un costado del ataque. Cuando el técnico deriotarra le mueve a la mediapunta, cambiando a
Raúl García
como falso nueve, otra lesión inoportuna en un entrenamiento.
Especulaciones aparte sobre el tiempo exacto de baja; Muniain vuelve a caer en uno de sus mejores momentos, jugando por donde más le gusta y donde más luce. Sería como para creer en gafes o males de ojo. Solo queda esperar a que la enésima vuelta sea la definitiva. Resiliencia.
Source link