La falta de gol se está convirtiendo en el gran lastre de la temporada para el Huesca. El conjunto oscense, colista con 13 puntos, a seis de la permanencia, no sólo es el equipo menos goleador de la categoría con apenas 14 aciertos en 20 jornadas sino que en estos momentos acumula cuatro consecutivas sin ver puerta.
Desde que el 30 de diciembre
Seoane anotara el 2-1 definitivo en el Celta-Huesca, los altoaragoneses no han vuelto a anotar un gol en Liga: ni ante Barça (0-1), ni ante Betis (0-2), ni en Getafe (1-0) ni contra el Villarreal en casa (0-0).
¿Logrará el Huesca la permanencia en LaLiga Santander?
Teniendo en cuenta que Seoane anotó la última diana liguera del equipo a los 83 minutos de aquel partido de Balaídos, el cálculo arroja la friolera de 367 minutos sin ver puerta en Liga. Una sequía que sólo se rompió en la Copa del Rey, cuando en segunda ronda del torneo Escriche anotó el único tanto azulgrana en el 2-1 contra el Alcoyano, que de esta forma se cobraba su primera víctima de LaLiga Santander en la Copa.
Un único, e inútil a la postre, tanto en los últimos cinco encuentros oficiales del equipo que dirige José Rojo ‘Pacheta’ habla bien a las claras de cuál es el principal problema del equipo para salvar la categoría. Un dato, el de la casi nula productividad ofensiva, que contrasta con el de los goles encajados.
En estos cuatro encuentros ligueros consecutivos en los que el equipo se quedó a cero, el marco del Huesca encajó apenas cuatro goles, a uno por encuentro. Pocos, muy pocos, pero que bastaron, ante la ausencia de goles a favor, para que el balance fuera de tres derrotas y un empate. A cero, por supuesto.
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