La Liga Endesa comienza la temporada 2022-23 con el mejor menú gourmet de Europa, con siete campeones continentales en sus filas y la mayor nómina de jugadores participantes en el Eurobasket, a los que se suman cinco campeones y cuatro subcampeones de la recién terminada AmeriCup.
La competición europea de selecciones y la Supercopa han sido el mejor aperitivo para abrir el apetito de baloncesto entre los aficionados.
Real Madrid y Barcelona parten, como cada edición, con el claro cartel de favoritos, pero más allá de esta circunstancia el resto de equipos siguen subiendo de nivel para hacer la competición más dinámica, interesante y atractiva.
El título, el campeón, será al final lo que quedará en la historia, pero el camino, las 34 jornadas de Liga regular y los playoffs durante nueve meses, serán el escenario perfecto para saborear el mejor baloncesto.
Hay muchos cambios en todas las plantillas, en los equipos punteros y en el resto, todos buscando cumplir sus objetivos con la mayor holgura posible.
También hay cambios de reglas como el saque rápido en campo defensivo que va a dinamizar el juego, haciéndole más vivo y atractivo. Habrá menos consultas de repeticiones en el vídeo por parte de los árbitros, que informarán al público de su decisión por megafonía y los entrenadores tendrán a su disposición dos revisiones de jugadas.
Tras madridistas y azulgranas, Cazoo Baskonia y Valencia, como equipos de Euroliga y por presupuesto, parecen los más preparados para asaltar las posiciones punteras de la clasificación, pero Joventut, Lenovo Tenerife, Gran Canaria, UCAM Murcia y Baxi Manresa también tendrán cosas que decir.
Girona, con el regreso de Marc Gasol a la competición nacional, Unicaja, Carplus Fuenlabrada, Casademont Zaragoza, Coosur R. Betis, Covirán Granada, Monbus Obradoiro, Río Breogán y Surne Bilbao completan la nómina de una Liga que se prevé apasionante.
Más allá de la pléyade de jugadores que adornan la competición, cualquier equipo puede ganar al rival que tenga enfrente en un momento determinado, lo que obliga a todos a tener ‘las orejas tiesas’ durante nueve meses. Más todavía a los equipos que participan en las distintas competiciones europeas, que deberán gestionar el cansancio, las lesiones y los estados de forma de la manera más óptima posible.
Por lo que a las figuras de la Liga se refiere, el devenir de los partidos irá poniendo a todos en su lugar correspondiente, aunque en la mente de todos ya hay varios nombres subrayados.
En el Real Madrid parecen claros los de Walter ‘Edy’ Tavares, Rudy Fernández, Sergio Llull, Dzanan Musa o Gabriel Deck. No es menor la nómina del Barça: Nikola Mirotic, Nicolás Laprovittola, Jan Vesely o Sertaç Sanli.
En Baskonia, Rokas Giedraitis, Matt Costello o Steven Enoch. En Valencia, Bojan Dubljevic, Jared Harper, Jaime Pradilla o Xabier López-Arostegui. En Joventut, Ante Tomic, Joel Parra o William Howard.
En Tenerife, Marcelinho Huertas, Gio Shermadini, Jaime Fernández o Tim Abromaitis. En Gran Canaria, Khalifa Diop, Olek Balcerowski o Andrew Albicy. En Murcia, Tadd McFadden, Artem Pustovyi o James Anderson.
En Manresa, Justin Hamilton, Juanpi Vaulet o Tyson Pérez. En Girona, Marc Gasol, Patricio Garino o Kameron Taylor, además de Aito García Reneses. En Fuenlabrada, Clevin Hannah o Christian Eyenga.
En Zaragoza Tryggvi Hlinason, Dino Radoncic o Santi Yusta. En Betis Shannon Evans, Georgios Tsalmpouris o Volodymyr Gerun. En Granada, Alex Renfroe, Cristiano Felicio o Dejan Todorovic. En Obradoiro, Leo Westermann, Thomas y Phil Scrubb. En Breogán, Marko Lukovic, Scott Bamforth o Ethan Happ. En Bilbao, Emir Sulejmanovic, Francis Alonso o Michale Kyser. En Unicaja, Dario Brizuela, Alberto Díaz o Kendrick Perry.
Los ingredientes del menú gourmet son de máxima calidad y el baloncesto resultante será, a buen seguro, digno de seguir siendo la mejor Liga nacional de Europa.