El número de muertos asciende a 27 por sismo en Turquía e isla griega

El sábado, los equipos de rescate atravesaron bloques de concreto y los escombros de ocho edificios derrumbados en busca de sobrevivientes de un poderoso terremoto que sacudió la costa egea de Turquía y el norte de la isla griega de Samos, matando al menos a 27 personas.

Más de 800 personas resultaron heridas.

El terremoto golpeó el viernes por la tarde, derribando edificios en Izmir, la tercera ciudad más grande de Turquía, y provocando un pequeño tsunami en el distrito de Seferihisar y en Samos. El terremoto fue seguido por cientos de réplicas.

El sábado temprano, los espectadores vitorearon cuando los rescatistas sacaron al adolescente Inci Okan de los escombros de un bloque de apartamentos devastado de ocho pisos en el distrito de Bayrakli de Izmir. Su perro, Fistik, también fue rescatado, informó el periódico Sozcu. Amigos y familiares esperaban fuera del edificio noticias de seres queridos que aún estaban atrapados en el interior, incluidos los empleados de la consulta de un dentista que se encontraba en la planta baja.

En otro edificio derrumbado, los rescatistas se pusieron en contacto con una mujer de 38 años y sus cuatro hijos, gemelos de 3, 7 y 10 años, y estaban trabajando para despejar un pasillo para sacarlos, informó la agencia estatal Anadolu. .

Otras dos mujeres, de 53 y 35 años, fueron sacadas de los escombros de otro edificio de dos pisos derribado el sábado.

En total, alrededor de 100 personas han sido rescatadas desde el terremoto, dijo a la prensa Murat Kurum, ministro de Medio Ambiente y Planificación Urbana.

Unos 5.000 miembros del personal de rescate estaban trabajando en el terreno, dijo Kurum.

Al menos 25 personas murieron en Izmir, incluida una anciana que se ahogó, según la Presidencia de Gestión de Emergencias y Desastres de Turquía, o AFAD.

Dos adolescentes murieron en Samos después de ser golpeados por una pared que se derrumbaba. Al menos 19 personas resultaron heridas en la isla, dos, incluido un niño de 14 años, fueron trasladadas en avión a Atenas y siete hospitalizadas en la isla, dijeron las autoridades sanitarias.

El pequeño tsunami que azotó la costa turca también afectó a Samos, y el agua de mar inundó las calles de la principal ciudad portuaria de Vathi. Las autoridades advirtieron a las personas que se mantengan alejadas de la costa y de edificios potencialmente dañados.

El terremoto, que según el Instituto Kandilli con sede en Estambul tuvo una magnitud de 6,9, se centró en el Egeo al noreste de Samos. AFAD dijo que medía 6,6. Y golpeó a una profundidad de unos 16 kilómetros (10 millas).

Se sintió a lo largo de las islas griegas orientales y hasta Atenas y Bulgaria. En Turquía, sacudió las regiones del Egeo y Mármara, incluida Estambul. El gobernador de Estambul dijo que no hubo informes de daños en la ciudad, la más grande de Turquía.

Turquía está atravesada por fallas y es propensa a los terremotos. En 1999, dos poderosos terremotos mataron a unas 87.000 personas en el noroeste de Turquía. Los terremotos también son frecuentes en Grecia.

Las autoridades advirtieron a los residentes en Izmir que no regresaran a los edificios dañados, diciendo que podrían colapsar en fuertes réplicas. Mucha gente pasó la noche en las calles, demasiado asustada para regresar a sus hogares, incluso si no sufrieron daños, informó la agencia de noticias DHA.

Más de 3.000 miembros del personal de rescate fueron enviados a Izmir, así como suministros de socorro. La Media Luna Roja Turca instaló cocinas.

En una muestra de solidaridad poco común en los últimos meses de tensas relaciones bilaterales, los funcionarios del gobierno griego y turco emitieron mensajes mutuos de solidaridad mientras los presidentes de Grecia y Turquía mantuvieron una conversación telefónica.

Las relaciones entre Turquía y Grecia han sido particularmente tensas, con buques de guerra de ambos enfrentándose en el Mediterráneo oriental en una disputa sobre fronteras marítimas y derechos de exploración energética. La tensión actual ha provocado temores de un conflicto abierto entre los dos vecinos y los aliados de la OTAN.




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