La jugadora islandesa Sara Björk anunció que el Olympique de Lyon, su ex equipo, le recortó su salario cuando vieron que estaba embarazada y que se perdería gran parte de la temporada. La joven no dudó en denunciar estos hechos ante el Tribunal de Instancia de la FIFA.
Durante esta semana se ha dado a conocer la resolución. El Tribunal está de parte de la jugadora y condena al club francés a pagarle 82 mil euros por el impago de su salario desde abril hasta noviembre, toda la época de su embarazo.
La centrocampista islandesa, Sara Bjork Gunnarsdottir, con su hijo en la Euro
Esto es debido a que años atrás la FIFA implantó unas nuevas medidas que protegen a la jugadoras que quieren ser madres durante su etapa como profesionales. “Permiso de maternidad de al menos 14 semanas, de las que ocho después del parto” y “pagar, como mínimo, a la futbolista con las dos terceras partes de su salario contractual“, son las medidas implementadas a favor de la jugadoras.
“Ahora estoy en la Juventus y estoy muy feliz pero quiero asegurarme de que nadie tenga que pasar por lo que yo pasé nunca más”, son las palabras que la centrocampista hacía públicas tras la resolución de su caso.