El orden en Nueva York ha cambiado: los Knicks pegan el 'sorpasso' a los Nets

El orden en Nueva York ha cambiado: los Knicks pegan el 'sorpasso' a los Nets

Definitivamente, ha cambiado el orden baloncestístico en Nueva York. O eso pretenden dejar claro unos New York Knicks que andan sumidos estos últimos días en el mundo ideal. Dos semanas después de vencer a los Brooklyn Nets tres años después, los Knicks endosaron a sus vecinos en el derbi neoyorquino un correctivo ilustrativo, severo, de los que duelen, sin nunca emoción más que el Madison Square Garden regocijándose en su placer: 142-118.

Y porque Jalen Brunson paró. A un nivel espléndido, consolidado ya entre los mejores bases de la liga, Brunson apuntaba a sumarse a las anotaciones de escándalo por encima de los 50 puntos con los 28 tantos que sumó en una primera parte con todo decidido (81-57).

Despojado definitivamente de la etiqueta de ‘segundo de Luka Doncic’, el base acabó  con 39 puntos y un casi perfecto 15/18 en lanzamientos que hablan muy bien de la magnitud de su nivel actual. Se cree capaz de hacer de todo y hasta de pedir, reclamándole a su entrenador, Tom Thibodeau, una especie de reconocimiento en el banquillo en un curioso momento que refleja a la vez la buena onda que se percibe en los Knicks.

Y es que estos Knicks pueden hablar ya de ‘sorpasso’, confirmado con este triunfo el adelantamiento a los Nets en la clasificación con el que había empezado ya la jornada quintos ya los de Thibodeau y sextos los de Jacque Vaughn en la que es su séptima victoria consecutiva después de vencer a los Celtics en la cita anterior.

El Madison Square Garden vive ahora mismo en un frenesí de felicidad, siendo el que acapara todo el lujo en la Gran Manzana. Tanto, que incluso en noches tan plácidas como esta un MVP como Derrick Rose sigue quedando reducido al rol de mero mentor de vestuario pero sin minutos.

Por su parte, los Nets no se hacen a esto de vivir sin lujos, sin Kevin Durant ni Kyrie Irving, reconvertido Brooklyn a un equipo ‘proletario’ en el que no queda otra que hacer énfasis en la defensa para aguantar en playoffs y evitar ser la presa fácil a la que miran babeando el numeroso pelotón de los Heat, Hawks, Raptors y compañía.

El fortalecimiento del Oeste con la partida de Irving y Durant a la otra punta del país ha dejado casi una plaza ‘libre’ en el Este. Desde el trade deadline, Brooklyn ha perdido 6 de los 8 partidos y su esperada caída de hace cada vez más evidente a pesar del positivismo de Vaughn y la energía que ha traído Mikal Bridges. El ex de los Suns aportó 21 puntos, aunque el también ex de Phoenix fue el máximo anotador con 33 tantos con un 13/18 en lanzamientos.

Quentin Grimes registró 22 puntos tras Brunson, con 21 tantos para Julius Randle en el equipo de Tom Thibodeau, que, además, de ambición de playoffs, quiere insistir en ello: la Gran Manzana pertenece a los Knicks.




Source link