Como un ciclón llega el Sevilla de Julen
Lopetegui a uno de sus partidos del año. Acostumbrados ya a citas de altura en la élite europea, los andaluces buscan los cuartos de la Champions en su mejor momento, después de haber puesto en serios aprietos la presencia del Barcelona en la una final (el 2-0 de la ida los pone por delante en la semifinal de Copa) y en una espectacular racha de nueve triunfos consecutivos, los siete últimos sin recibir un gol.
El rival, encima, llega con muchas dudas. El otrora temible Borussia
Dortmund ya tiene incluso sustituto -Marco Rose- para su actual entrenador, Edin Terzic, y su trayectoria dibuja una tendencia descendente que llevaba incluso a su gran estrella Erling Haaland a avisar sobre lo que les espera en el Sánchez Pizjuán. “El Sevilla es un equipo fuerte y jugando así no tendremos opciones”, decía tras el empate en casa ante el Hoffenheim, que deja a los amarillos sextos en la Bundesliga a 15 puntos ya del Bayern.
Las dudas que rondan a uno de los grandes del fútbol europeo, que ha sumado sólo una victoria en sus últimos seis partidos, da un ficticio rol de favorito al Sevilla del que han querido huir su entrenador y su jugador con más kilómetros en la Champions, Fernando. El único precedente, en la fase de grupos de la competición europea en 2011, confirmaría esta tesis, ya que los bancos ganaron en Iduna Park (0-1) con un gol del italiano Cigarini en el debut de Gregorio Manzano y un 2-2 en la vuelta en Nervión.
Sin Ocampos ni Acuña pero con Jesús Navas
La buena noticia en el Sevilla, que no podrá contar aún con Ocampos y Acuña, lesionados, es el regreso de Jesús Navas, disponible tras perderse tres partidos por una sobrecarga en el aductor. La cita también tiene el atractivo del estreno en la Champions del ‘Papu’ Gómez, único fichaje en el mercado de invierno que ha tenido una espectacular entrada en el equipo.
Con el meta Bono en plan estrella junto a otros cracks que están llamando la atención como Koundé y En-Nesyri, el Sevilla es ahora mismo un equipo muy potente que aspira a todo y que busca su tercera participación en su techo en el torneo, los cuartos de final, que ya disputó en 2018 ante el Bayern y en la antigua Copa de Europa en 1958 ante el Real Madrid de Di Stéfano.
Source link