El Sevilla presenta sus hechuras de campeón

El Sevilla presentó en Alemania sus hechuras de campeón metiéndose con autoridad en los cuartos de final de la Europa League en este formato exprés de la fase final ideado por la UEFA. Dominador absoluto de esta competición, con cinco títulos en una década (de 2006 a 2016), el equipo andaluz pasó por encima de la Roma, el equipo más en forma de la liga italiana, y presentó con credenciales sólidas que está dispuesto a meterse en la final de Colonia el día 21.

Ni el coronavirus que se coló en su vestuario pero que no pudo frenar la ilusión de sus jugadores, ni estar dos semanas sin competir, ni perderse algunos entrenamientos por el positivo de Gudelj… parece que pueden frenar al equipo de Julen Lopetegui, que exhibió sobre la hierba del MSV Arena de Duisburgo una superioridad aplastante sobre su rival, al que se merendó táctica y físicamente en una primera mitad en la que ya puso las cosas muy claras a su enemigo: 2-0 al descanso.

Avisó a los seis minutos con un zapatazo de Ocampos que repelió Pau López, metió más miedo con un cabezazo de Koundé al larguero y asestó la primera puñalada con una internada de un Reguilón en moto ante Bruno Peres. El Sevilla encontraba los huecos con facilidad con balones largos de una banda a otra y Banega encontró al madrileño para que el demarraje del lateral cedido por el Real Madrid se convirtiera en el 1-0 tras superar a Pau Lopez en su salida metiéndole el balón por debajo del cuerpo.

De la Roma no había noticias. El trabajo en defensa de Koundé y Diego Carlos ante el batalleo de Dzeko era impecable y la primera media hora fue un monólogo de los de Lopetegui, que antes del descanso pegaban otro hachazo en una galopada de Ocampos que ponía un balón de oro a En-Nesyri, quien empujaba el balón casi a placer y con Pau López batido.

Todo el trabajo estaba casi hecho, así que la segunda parte fue más de verlas venir por parte de los andaluces. La Roma lo intentaba, pero el sistema defensivo del Sevilla es una roca, por eso lleva 18 partidos oficiales sin perder, desde el 9 de febrero. Y arriba, aún tendría tiempo de enseñar más todavía los dientes. Koundé haría el tercero, pero fue anulado por fuera de juego. Y Banega, que apura sus últimos partidos como sevillista antes de emprender aventura en Arabia Saudí, estrelló una falta en la madera queriendo redondear la triunfal entrada de los nervionenses en los cuartos de final y Koundé, que se resistía a marcharse sin marcar, remataba a bocajarro ante Pau López a punto de anotar otra vez el tercero.

El Sevilla ha llegado y ha dicho aquí estoy yo. Hechuras de campeón tiene y va lanzado. Los de Lopetegui se medirán el martes al vencedor del Olympiacos-Wolverhampton.