¿Cómo le va la vida?
Bien, aquí estamos, vuelta a los orígenes. Contento, ilusionado de volver a arrancar otra vez en el Amore. Con ganas y centrado.
¿Por qué el Amorebieta?
A mi edad ya hay que valorar el fútbol de otra forma. Siempre he tenido la ilusión o la ambición de seguir mejorando, de intentar los mayores retos y éxitos y este año, no me preguntes por qué, me ha hecho un clic en la cabeza.
¿Por qué?
Por diferentes circunstancias (entre risas). La familia, los niños que ya están en su entorno, la edad, la trayectoria… No sé por qué, pero me he decidido por volver a los orígenes a pesar de tener cosas deportiva y económicamente más interesantes.
¿Ofertas concretas?
Sí e intereses de diferentes sitios y de categorías superiores, pero ni las he valorado porque no he tenido esa ilusión y la posibilidad del Amore ha estado ahí desde el primer día. Tengo que agradecer tanto al club como al cuerpo técnico lo que han esperado por mí porque yo tampoco me decidía, pero no podía rechazar esta vuelta a casa. Posiblemente será cerrar un círculo, pero no quiero pensar más allá.
Le leía este verano que los jugadores necesitan apoyo cuando les llega la hora de la retirada.
Igual está sacado un poco de contexto. Me refería a que un futbolista tiene que pensar en el día a día, lo que has hecho antes no vale para nada porque debes intentar mejorar y progresar, pero siendo conscientes todos de que el fútbol termina y llega un momento en que tienes que salirte del verde y mirar hacia otro lado. Quizás en otros países sí que puede haber un poco de más ayudas en todos los aspectos.
¿Usted tiene estudios?
Saqué selectividad y empecé a hacer delineante, no lo terminé. Me falta el tercer nivel para el título de entrenador y tengo el universitario de director deportivo de la Federación.
¿Proyecta su futuro en el fútbol?
Me gusta el fútbol y me cuesta pensar mi vida fuera del fútbol, con lo cual me veo relacionado con el fútbol. No sé si de entrenador o desde los despachos, pero sí me gustaría.
Hablemos del pasado. ¡Menudo palo la pasada temporada con el Eibar!
Año muy bonito durante y cuando parecía que lo teníamos muy fácil llegó la debacle de Alcorcón. Luego hicimos un partidazo en Girona y en la vuelta ellos fueron superiores. Palo gordo porque no tuvimos la suerte de ascender.
¿Qué opinión tiene de Garitano?
Como entrenador me gustó un montón porque el modo que tenía de afrontar cada partido y el planteamiento de los partidos eran muy buenos. Se veía en el campo que lo que decía él pasaba. Al final si no logras el objetivo después de hacer tantos puntos, los palos van para el entrenador, pero no. Gaizka me demostró que es un entrenador muy preparado.
¿Qué recuerdo le queda del Athletic?
Tuve la suerte de coincidir en una generación que hemos podido disfrutar de cosas importantes. Casi todas las temporadas estuvimos en Europa, llegamos a finales de Copa, ganamos la Supercopa… Mirándolo con perspectiva para cualquier vizcaíno, más para mí que lo he mamado desde pequeño, jugar en el Athletic ha sido el sueño cumplido.
Debutó con Caparrós…
En Copa (se anticipa) contra el Recre y ese año jugué 14 partidos. La temporada siguiente estuve a punto de salir en verano y al final no se dio la situación porque el míster me dijo que iba a tener más oportunidades y no fue así. Luego tuve una pubalgia que me lastró mucho, me tuve que operar y ya había firmado para ir a Cartagena. De ahí tres años al Elche y luego la vuelta.
Con Valverde le costó entrar.
Venía con ganas de comerme el mundo porque me habían salido muy bien las cosas en el Elche, ascenso incluido, pero al final había muchos compañeros y Laporte estaba prácticamente saliendo. Ese año no jugué casi nada, pero mi cabeza estaba centrada en mejorar, en intentar hacerme un hueco. La temporada siguiente, a raíz de un partido contra el Almería que necesitábamos ganar sí o sí porque si no nos metíamos en descenso, jugué, metí el gol y empecé a entrar más en el once.
¡Y jugó la final de Copa del Camp Nou como titular!
Sí, la final en que Messi coge el balón y se va de todos…
Aquel día la tuvo con Neymar.
Aquel era un de los mejores Barça de la historia y encima jugábamos en el Camp Nou. Neymar se pasó con Bustinza y nos enfrentamos a él con toda la rabia y energía del momento. Son cosas que pasan en directo, reacciones humanas.
¿Qué le parece la polémica con la celebración de los goles de los brasileños?
Son diferentes formas de ver las cosas, pero son momentos puntuales dentro del terreno de juego que nos pasan a muchos y fuera se nos olvida.
¿Es socio del Athletic?
Sí.
¿Cómo se ve el club desde fuera?
Tiene mucho mérito lo que hace el Athletic. Hay muy buena plantilla, pero si te pones a mirar otros equipos, está clarísimo que también hay muchísimo nivel. El Athletic en casa es un equipo muy fiable y Ernesto, un valor seguro. Al final va a estar peleando ahí arriba.
De centrales va sobrado.
Ahora mismo los centrales están a un nivel muy muy bueno. Cuando voy a San Mamés me gusta fijarme en ellos y disfruto viéndoles porque tienen solvencia, saber estar y dominan todas las situaciones que da gusto.