El Valencia Basket recibirá este domingo al BAXI Manresa, en la décima sexta jornada de la Liga Endesa, en un encuentro en el que se juega buena parte de sus opciones de clasificarse para la Copa del Rey y lo hará con seis o siete bajas pero tras haber logrado dos meritorias victorias esta semana en las mismas circunstancias en la Euroliga.
El miércoles el equipo de Álex Mumbrú se impuso en la Fonteta al Anadolu Efes, vigente campeón del torneo, y el viernes repitió victoria en la cancha del ASVEL Villeurbanne, en la que nunca había ganado pese a que dejó escapar veinte puntos de ventaja. La recuperación de esos esfuerzos será una de las claves del partido ante un rival más fresco.
Los dos triunfos han llenado el depósito de confianza de un equipo que seguro que volverá a contar con las bajas de tres de sus bases (Sam Van Rossom, Martin Hermannson y Jared Harper) y que si cuenta con Chris Jones (que no ha estado en estos dos encuentros y es duda) no sabe en qué circunstancias lo hará. También son bajas seguras Víctor Claver, Millán Jiménez y Jasiel Rivero.
Pero el Valencia llega a este tramo final de la primera vuelta sin margen de error para clasificarse para la Copa. Con siete victorias en su casillero su opción pasa por ganar los dos partidos que le quedan, ante el Manresa y el Casademont Zaragoza, y hacerlo de la manera más holgada posible para reforzar el ‘basket average’ general y pasar por delante de sus rivales en un empate múltiple.
Eso sí, el equipo valenciano no depende de sí mismo y necesita que alguno de los rivales que tiene por delante pinche. El Valencia ya sólo puede acabar séptimo u octavo y por tanto a dos de las tres plazas coperas que aún quedan por asignar en este final de la primera vuelta.
El conjunto valenciano es décimo y tiene siete triunfos, los mismos que el Obradoiro y que el UCAM, que van por detrás en la clasificación. Por delante el Breogán, noveno, el Surne Bilbao Basket, octavo, y el Gran Canaria, tienen ocho victorias. El ‘basket average’ del Valencia es de +9, mejor que el del Breogán (+3), Obradoiro (-46) y Murcia (-53) pero peor que el del Gran Canaria y el Bilbao (+13).