El Real Madrid vuelve hoy al trabajo después de que Zidane diera ayer descanso a la plantilla en un día donde los jugadores pasaron nuevas pruebas de COVID-19 en sus respetivos domicilios. El equipo blanco ya avista en el horizonte el partido más importante de la temporada con la remontada como misión ineludible sino quiere repetir el fracaso del año pasado en Europa, donde cayó en esta misma instancia ante el Ajax de Amsterdam en una noche negra para el madridismo.
El City de Guardiola espera con la ventaja del 1-2 de la ida y el objetivo de eliminar a Zidane, que no sabe lo que es caer en la Champions como entrenador del Madrid. El técnico francés exprimió la semana pasada a la plantilla para que llegue en las mejores condiciones físicas y se supone que en los cuatro entrenamientos de esta semana (tres en Valdebebas y el último en el Etihad el jueves) hará más hincapié en el aspecto táctico para preparar su duelo particular con Pep Guardiola.
La ausencia de Sergio Ramos por sanción condiciona totalmente el sistema defensivo del equipo y salida de balón al tiempo que deja al Madrid sin su líder en el terreno de juego. El capitán, eso sí, viajará con la expedición para apoyar al equipo en A cambio, Zidane podrá contar con Courtois y Hazard, que se habrían perdido el partido por lesión si la vuelta se hubiera disputado cuando estaba previsto antes de la pandemia.
El cuadro blanco afronta el partido con la ambición de ganar y con la tranquilidad de no jugarse la temporada a un partido toda vez que ha conquistado LaLiga, el título más valorado por un Zidane que no renuncia a nada en Europa. El Madrid avista la final del Etihad como el paso previo para estar en Lisboa. Solo queda mantenerse vivo en Champions o irse de vacaciones.
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