La historia de un buzo que ha encontrado un iPhone en el fondo del mar ha dado la vuelta al mundo. Lo más sorprendente de todo es que ha conseguido localizar al dueño del teléfono. El protagonista es Alex Schulze, quien estaba buceando en Boca Raton Inlet, en el sur de Florida (Estados Unidos).
Durante sus inmersiones, está acostumbrado a encontrarse basura en el fondo del mar, pero en esta ocasión también vio un iPhone. El teléfono estaba en el interior de una funda estanca, aunque no se encendía, así que decidió llevárselo a casa.
Este no era el primer móvil que se encontraba, pero la mayoría de veces los teléfonos estaban destruidos por el agua salada o bloqueados. Sin embargo, en esta ocasión el iPhone sobrevivió gracia a la funda estanca. Una vez en su despacho, pudo cargarlo y, una vez lo encendió, consiguió acceder a los contactos de emergencia.
Había un contacto que decía «mamá», así que llamó y al contestar la mujer dijo: «Dios mío, no puedo creer que hayas encontrado el teléfono de mi hijo». Así, el buzo puedo quedar con el dueño del móvil, que se acercó a su oficina para recogerlo.
En declaraciones a ‘WKMG News 6 ClickOrlando’, Alex Schulze ha explicado que «solo estaba limpiando el lago Boca» cuando encontró el iPhone. Una historia con final feliz.
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Funda estanca para el teléfono
Una de las lecciones que hemos aprendido de esta historia es la importancia de llevar el teléfono en una funda estanca si vamos a ir con él a la playa. Aunque sea resistente al agua, la salitre puede estropearlo, así que mejor hacerse con una de estas fundas.
Para medir la resistencia al agua se utiliza la certificación IP: desde el grado 1 (resiste la entrada de agua por goteo desde 20 centímetros de altura durante 10 minutos) hasta el grado 6 (es completamente estanco). Además, si amos a hacer snorkel o submarinismo, hay fundas acuáticas con grado IP 7 (soporta 30 minutos a 1 metro de profundidad), IP 8 (soporta 30 minutos a 1,5 metros de profundidad) e IP 9 (soporta una presión de 80 a 100 bares).
Por lo tanto, antes de lanzarnos a comprar una funda debemos tener claro a qué vamos a exponer nuestro teléfono. Pueden ser simples salpicaduras por estar cerca dela orilla haciendo fotos o entrar en contacto con el agua cuando nademos o buceemos.
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