Los criterios de reparto de los 16.000 millones del fondo autonómico para combatir los estragos del coronavirus han provocado un incendio en varias comunidades de distinto color político. El malestar con la distribución del primer tramo, dotado con 6.000 millones y del que Madrid y Cataluña se llevan casi la mitad, cala en territorios muy castigados por la pandemia y gobernados por el PSOE como Castilla-La Mancha y en otros como Galicia, feudo del PP y mucho menos golpeada por el virus.La inyección “histórica” de dinero que recibirán las comunidades para combatir los daños de la pandemia sí ha contentado a Madrid, la autonomía más beneficiada, pero no a Cataluña, la segunda con mayor asignación. “Es una buena noticia”, celebró el vicepresidente del Gobierno madrileño, Ignacio Aguado (Cs), la asignación de 1.500 millones. El de Madrid fue uno de los pocos aplausos que han llegado desde los diferentes territorios.Los fondos están destinados a financiar el gasto sanitario y se han distribuido teniendo en cuenta varios criterios relacionados con el impacto de la pandemia: la población protegida, las hospitalizaciones, los ingresos en UCI y las pruebas PCR efectuadas. Los Gobiernos autónomos discrepan entre ellos sobre los factores que deberían pesar más para distribuir las cantidades, incluso los que comparten color político. La Junta de Andalucía, que a diferencia de la Xunta de Galicia había pedido que el parámetro principal fuera la población, recibió este miércoles la asignación de 597,6 millones con un “mal empezamos”.“Nos hemos llevado el primer golpe en la frente. El Gobierno andaluz va a estar en contra y de frente”, advirtió el portavoz del Ejecutivo de coalición de PP y Ciudadanos, Elías Bendodo, quien demandó que el Gobierno central reparta los fondos europeos aprobados el pasado martes siguiendo los criterios de Bruselas, es decir, la población, el PIB per cápita y la tasa de desempleo.La Generalitat recibió con frialdad el reparto del fondo covid porque los 1.246,5 millones de euros que le corresponden en este primer tramo están muy lejos de su estimación de la factura de la pandemia. Hace una semana el vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, explicó en la Comisión de Economía del Parlament que el coste de la crisis, contando tanto la bajada de ingresos como el gasto extra para este año, asciende a 4.972 millones de euros en Cataluña, la comunidad más afectada ahora por los rebrotes.El Gobierno catalán calculó en un principio que de los 16.000 millones recibiría 3.225 millones, casi el triple de la cantidad adjudicada en esta primera entrega, y se quejó de que aun así no cubriría todo el impacto del coronavirus en sus arcas. Una portavoz de la vicepresidencia económica recuerda que desde que el Ministerio de Hacienda planteó esta transferencia de recursos el Govern criticó que el montante fuera de 16.000 millones y pidió que se elevase a 25.000 millones.También para el Gobierno de Castilla-La Mancha, del socialista Emiliano García-Page, este primer tramo del fondo covid-19 “deja mucho que desear” para los intereses de la comunidad, a la que han correspondido 319,2 millones. La portavoz del Ejecutivo regional, Blanca Fernández, esgrimió este miércoles que solo en abril Castilla-La Mancha tuvo que desembolsar 352 millones para hacer frente a la pandemia y este primer ingreso resultaría insuficiente para cubrir siquiera ese mes.“Siempre queremos más”El Gobierno socialista de Aragón recibirá más de lo inicialmente previsto pero ve “insuficiente” la cantidad porque, señala el consejero de Hacienda, Carlos Pérez, no cubre “el 100% del coste real de los servicios” que se prestaron durante la pandemia. Fuentes del Ejecutivo de Cantabria, en manos del regionalista PRC y del PSOE, tampoco se declaran satisfechas con un reparto que consideran “injusto”. “Siempre queremos más”, se limitó a decir este miércoles el socialista Pablo Zuloaga, vicepresidente y portavoz del Gobierno.La Xunta considera “totalmente insuficiente” la parte que le ha tocado. “El Gobierno central cambió de manera unilateral los criterios de reparto utilizados en el sistema de financiación autonómica y en el primer reparto de fondos covid aprobado en marzo, y este cambio penaliza claramente a Galicia”, se queja el Ejecutivo de Alberto Núñez Feijóo (PP). Sostiene que el Ministerio de Hacienda ha reducido el peso de la “población protegida” en el cálculo de lo que le corresponde a cada territorio, un cambio que perjudica a comunidades con un alto índice de envejecimiento como Galicia y resta importancia a un “factor clave” para determinar el gasto sanitario.En esta línea se manifiesta Castilla y León. Fuentes de su Gobierno, del PP, califican el reparto de “injusto” y critican que “no paga los sobrecostes reales de la pandemia en sanidad y servicios sociales” y “deja en la estacada” a los territorios más afectados.El presidente de Murcia, Fernando López Miras (PP), tacha el reparto del fondo estatal de “absolutamente intolerable” porque su comunidad, subraya, es la que peor parada sale de toda España en la aportación por habitante. Los 98 millones que se le han adjudicado a Murcia suponen 67,07 euros por habitante frente a la media española de 122,08 euros. La diferencia aumenta aún más, señalan fuentes del Gobierno de López Miras, si se compara con lo que recibirá Madrid (217,73 euros por habitante), Melilla (182,44) o Ceuta (173,04), los mejor financiados por población. Miras califica la distribución de “maltrato, castigo o deslealtad” a la Región de Murcia por parte del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.Entre los territorios que no se quejan del reparto están Extremadura, Comunidad Valenciana, País Vasco y Asturias. El presidente de la Junta extremeña, el socialista Guillermo Fernández Vara, se pronunció hace días sobre los 96 millones que recibirá la comunidad y calificó la cifra de “adecuada”. Es uno de los pocos líderes regionales que defiende los criterios adoptados por el Gobierno central para distribuir el fondo.Fuentes del Gobierno vasco aducen que la cuantía ha sido “decidida unilateralmente” por el Gobierno central y es “correcta” según “sus criterios”. Fuentes de la Consejería de Hacienda del Principado de Asturias, gobernado por el PSOE, declinan referirse a la cantidad recibida como “mucho o poco” y celebran “un dinero vital para afrontar los efectos de la pandemia”.Con información de Eva Sáiz, Camilo S. Baquero, Juan Carlos Espinosa, Juan Navarro, Ignacio Zafra, Manuel Viejo y Virginia Vadillo.
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