España está en semifinales. ¿Quién lo iba a decir, tras el difícil año por el que ha pasado la selección? Pues sí, la Roja está entre las cuatro mejores selecciones del mundo. El Mundial de Australia y Nueva Zelanda está repleto de sorpresas, y la selección española es una de ellas.
Con humildad, consciente de que no tiene el mejor equipo posible hablando de calidad, pero sabiendo jugar conjuntamente para sacar los partidos adelante. Ha habido un cambio de mentalidad. Lo decía Aitana Bonmatí, pero también Jennifer Hermoso confesaba que el mensaje de las jugadoras era ‘vamos que se puede’, y Cata Coll confirmaba que era cierto con una clara afirmación: “sabía que íbamos a marcar”.
Años atrás, cuando España encajaba un gol, no sabía recomponerse ni revertir el resultado. Ante Países Bajos sucedió todo lo contrario. Las jugadoras que salieron al terreno de juego sabían a lo que iban. Cuando Stefanie Van der Gragt anotó el gol del empate en el 91’, con once minutos del tiempo de descuento aún por disputar, “me cagué un poco en todo”, dijo Laia Codina.
En la prórroga, el equipo tuvo las ideas muy claras. Se las había dicho Jorge Vilda, pero también les salía del alma ir a por todas. “Hemos jugado con el corazón y el alma en la prórroga”, comentaba Mariona, la protagonista del primer gol de España.
La experiencia de las más veteranas se trasladó en el verde con un buen posicionamiento. Mariona Caldentey, que fue la única novedad en el once, pudo incorporarse en el medio del campo. El objetivo, igualar numéricamente a las neerlandesas y evitar una peligrosa entrada de Lieke Martens al centro del campo con Jill Roord, Damaris Egurrola y Jackie Groenen, que perseguía a Aitana constantemente.
La juventud de Salma Paralluelo sirvió como revulsivo, para dar descanso a Mariona, que cumplió con sus tareas, y para hacer explotar el talento joven de la selección. Salma hizo una carrera contra las leonas. Ganó, como no podía ser de otra forma, la atleta que ilusionaba a todo un país con tan solo 19 años. Salma dio el permiso para ilusionarse, porque España puede ganar el Mundial.
Fue especial porque fue la primera eliminatoria que, decidiéndose en la prórroga, España conseguía una victoria. Las ibéricas cayeron ante Austria en la Eurocopa de 2017 tras ser derrotadas en la tanda de penaltis.
Tampoco pudo ser en la pasada Eurocopa, en Inglaterra el 22. Pues la Roja cayó ante las anfitrionas, que se acabaron llevando el trofeo de campeonas de Europa. A la tercera va la vencida. Hasta el momento, en este Mundial, todas las prórrogas habían sido insuficientes para determinar un partido, teniendo que acudir a la tanda de penaltis.
El duelo entre España y Países Bajos fue una excepción. España consiguió su primera victoria en una prórroga, y fue histórico por este mismo motivo, pero también porque estarían por primera vez entre las mejores del mundo.