Hoy era el día. 18 de abril. La fecha inicialmente prevista para que Athletic y Real Sociedad disputaran el derbi vasco más importante de la historia. Sevilla era el escenario. De norte a sur. Pero una pandemia ha truncado esta y miles de ilusiones más. “De poder ser uno de los días más importantes de nuestras vidas… Es lo que ha tocado”, aseguró con resignación Unai López en la entrevista concedida a Radio Marca Bilbao.
Su deseo, como el de los futbolistas de ambas plantillas y el de todos los aficionados, es “poder jugar pronto”, aunque toca ponerle paciencia al asunto: “Hasta entonces no queda otra que esperar y tener la final en la recámara. A ninguno se nos olvida, pero ahora mismo hay cosas más importantes”.
No será la primera final para Unai López. “Tuve la suerte de estar en la del Camp Nou contra el Barça”, recordó. Sin embargo, la vio desde la grada. No entró en la convocatoria de 18 efectivos de Valverde. La que aparece en el horizonte en La Cartuja goza de un plus: “Esta es un poco más especial para mí al ser de Donostia, tengo amigos que son de la Real”. Sin pasar por alto que el centrocampista recaló en Lezama procedente de Zubieta en edad juvenil.
Un trasvase “un poco atípico”, rememoró, aunque dentro de la normalidad. “Era pequeño y la influencia no es tan grande, pero siempre se genera revuelo cuando alguien se va de la Real al Athletic o del Athletic a la Real. Lo supe llevar bien”, manifestó el rojiblanco a la par que añadía que se encuentra “contento de estar aquí y de pertenecer a este gran club”.
Aspirar a disputar la final y que las aficiones de ambos clubes estén presentes en La Cartuja son anhelos que van de la mano. También en la lista de deseos de Unai López: “Es lo que queremos, ninguno nos planteamos una final sin público. Pero hay cosas más importantes que solucionar y luego ya veremos si se puede jugar la final. Todos deseamos que sí y, si se puede, con nuestra gente porque para nosotros es jugar con uno mas”. A lo que no ha dado muchas vueltas el donostiarra es a una posible celebración en caso de título, prefiere “no anticiparse” y dejarlo para cuando toque: “Primero vamos a dejar que llegue la final”.
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