Jarro de agua fría para el Athletic. Derrota (0-1) en su regreso esta temporada a San Mamés ante el recién ascendido Cádiz, que ha acabado con dos jugadores menos sobre el terreno de juego. El capitán rojiblanco, Iker Muniain, asume que han recibido un palo y lamenta no haber aprovechado la superioridad para confirmar los buenos apuntes de la victoria de Eibar.
Muniain confiesa que están afectados por este revés. Una decepción que ha mezclado con el análisis del encuentro. “Realmente estamos fastidiados por esta derrota en casa. Veníamos de un buen partido en Ipurua con esos tres puntos. Esperábamos prorrogar esas buenas sensaciones. Creo que hemos llevado el peso del partido en la primera parte, hemos intentado sacar balones por fuera para centrar, y también por dentro. Ellos han estado bien ordenados y replegados. Ha sido difícil, un partido con pocas ocasiones claras. Se ha decidido por una jugada desafortunada en la que hemos metido el balón en nuestra propia portería. Ha sido una pena, pero esto acaba de empezar y hay que seguir”, ha manifestado en Movistar.
Los leones no han podido ante u rival en inferioridad numérica. El ‘10’ rojiblanco ha comentado que “a veces, cuando eres superior se abren más espacios y tienes más opciones, lo hemos buscado, lo hemos intentado, hemos colgado balones… No ha habido manera. También hay que darle su mérito a ellos. Con dos más, tampoco hemos podido aprovechar esa superioridad más amplia. Ha sido una lástima que no hayamos podido sumar los tres puntos, ni siquiera uno, simplemente por quedarnos con dos más… Es un golpe duro perder en casa, pero tampoco podemos ser más pesimistas de la cuenta, hay que levantar la cabeza, entrenamos mañana y el domingo tenemos otra pelea con el Alavés en un derbi”.
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