Esto no ha terminado: los traspasos bomba que quedan por llegar y otros posibles

Bradley Beal a los Suns, Chris Paul a los Warriors o Marcus Smart a los Grizzlies. Con casi dos semanas ahora sin movimientos de impacto, parece que las aguas se han calmado en el siempre intrigante e impredecible mercado de la NBA. Pero es una falsa tranquilidad que un traspaso de esos que sacuden la liga puede hacer saltar por los aires en cualquier momento. La mayoría se ha cortado, pero mucha tela puede quedar por cortar en la mejor liga del mundo con movimientos inminentes y otros potenciales.

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Pulso con los Blazers que va para largo 

Damian Lillard 

El traspaso que tiene en vilo a toda la NBA y que tiene mucho de sentimental porque va también de un ‘one club man’ que dejará de serlo tras toda una vida en Portland. Damian Lillard tiene prisa, mucha prisa por irse de los Blazers, porque, a sus 33 años, se le acaba el tiempo de ganar el anillo y su equipo de siempre no le ofrece ninguna garantía tras finalmente renunciar a conseguir una estrella de rendimiento inmediato por Scoot Henderson. Y no quiere el All-Star entrar en ese club de los Karl Malone y Allen Iverson de mitos que transmiten cierta compasión por no ser capaces nunca de alcanzar el cénit.
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​Sin embargo, el asunto va para largo. ‘Dame’ sólo quiere ir a Miami y así se lo ha hecho saber su agente a sus demás pretendientes, los Celtics entre ellos. Pero, ya que pierden a su baluarte, los Blazers no se lo van a poner tan fácil a Lillard pues quieren sacar también el máximo posible.

Como dijo el General Manager de la franquicia de Oregon, Joe Cronin, “si tiene que tomar meses, tomará meses”. Incluso Ramona Shelburne, de la ESPN, apuntaba que la situación podría convertirse en una igual de tensa y compleja a la que vivió Ben Simmons con los Sixers hace dos años.
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​Con la necesidad de hacer un hueco en la masa salarial, los Heat quieren quitarse de encima a Tyler Herro para traer a ‘Dame’, pero los Blazers no quieren al escolta y debería entrar al menos un tercer equipo en la operación. Otro punto de conflicto.

2

Para ir a los Clippers, ¿mejor quedarse en los Sixers?

James Harden 

La ‘Barba’ le hace la competencia a Lillard en cuanto al posible traspaso de otra estrella de calibre que puede sacudir la NBA, aunque Harden ya ha cogido eso como rutina en los dos últimos años, de un sitio para otro. 

El base-escolta activó con Philadelphia su ‘player-option’ por un año y 35,6 millones con la idea de ser traspasado pero el paso de los días parece acercar a la ‘Barba’ a permanecer un año más en los Sixers. Así lo apunta el especialista de la ESPN Dave McMenamin, además de que todos los peces gordos de ‘Philly’ claman porque se quede, su querido amigo Daryl Morey, Joel Embiid y el siempre sincero Patrick Beverley con su llegada a los Sixers. 

Quién sabe si en el fiestón de ‘celebrities’ del domingo Embiid pudo acabar de convencer a Harden, al que se la ha vinculado a unos Clippers menos fiables aún que los Sixers en playoffs con las lesiones de Kawhi y George. Su contrato es asumible con sólo un año de permanencia pero los 35,6 millones que va a costar y un nuevo convenio más estricto con la masa salarial no tanto.

3

Un lastre que los Clippers quieren quitarse de encima 

Paul George 

Los Clippers no verían con malos ojos quitárselo de encima y han valorado lo que pueden sacar por él. Además de su canción de siempre con las lesiones -no ha jugado además los dos últimos playoffs-, por si el conjunto angelino no tuviera suficiente ya con Kawhi Leonard, es muy caro con los 45 millones que va a costar el año que viene -igual que el ex de los Raptors-, con todas las limitaciones que ello implica.

Sin embargo, por si su poca fiabilidad en cuanto al estado físico no fuera suficiente carga ya, si no rebaja sus pretensiones va a ser imposible mandarlo a otro equipo. Necesitados de otra estrella, los New York Knicks preguntaron por él y George pidió nada menos que un contrato de 4 años y 220 millones. Una petición absolutamente fuera de la realidad para un jugador que apenas ha participado en 87 encuentros en las dos últimas campañas.

4

Líos de faldas y problemas de dieta

Zion Williamson 

El traspaso con el que se especulaba antes de la noche del draft no se produjo finalmente y parece que las aguas se han apaciguado, pero con el currículum que lleva junto a algún que otro escándalo extradeportivo y ciertas actitudes hacen susceptible de ser canjeado al número 1 del draft de 2019. Y ya se sabe que el verano de la NBA es muy largo.

​Asombró el año pasado con 26 puntos, 7 rebotes y 4,6 asistencias de media hasta que se rompió para revivir viejas preocupaciones en torno a él con respecto a las lesiones para un jugador de apenas 23 años, en blanco el curso 21-22 y sólo 29 partidos el curso pasado. 

El verano empezó movido con su flirteo con una actriz porno y sus recientes declaraciones despiertan dudas sobre su verdadero compromiso y ambiciones. En una reciente entrevista en el podcast de Gilbert Arenas, Williamson, criticado varias veces por su sobrepeso, ha reconocido que puede poner más trabajo y lo duro que es para él seguir una dieta. 

Sin embargo, lo más preocupante del ala-pívot es su manifestado desinterés por seguir desarrollando su juego ofensivo, subestimando recursos como el tiro flotante o de media distancia en un jugador que también necesita trabajar mucho en su tiro exterior. Un Ben Simmons de la vida.

5

¿La hora de salir por fin de Toronto?

Pascal Siakam 

No dejan de sucederse las informaciones sobre las muchas novias que quieren seducir a Pascal Siakam, uno de los más pívots más completos y a la vez más infravalorados de la NBA. El insider de los Toronto Raptors, Michael Granger, lleva semanas insistiendo en ello y, aparte de los Atlanta Hawks, también señala Orlando Magic como otro equipo entrando en la puja, necesitados los de Florida de un reemplazo de ‘center’ polifacético tras cortar a Bol Bol. 

El problema, más que el propio Siakam, son los Raptors, que llevan todo el año dando bandazos en cuanto hasta qué punto iniciar una reconstrucción desde un punto u otro. 

Después de la salida de Fred VanVleet, la de camerunés -otra pieza clave en el anillo de 2019-, supondría casi empezar desde 0. Con 29 años y entrando en su último año de contrato, puede ser la última gran oportunidad para sacar algo por él.

6

Un alto precio no justificado el último año

Deandre Ayton

La idea de los Phoenix Suns es ver Kevin Durant, Devin Booker, Bradley Beal y Deandre Ayton juntos en pista. Pero a nadie se le escapa que la masa salarial del conjunto de Arizona está al límite con tanta estrella -han tenido que firmar casi a medio roster por el mínimo-, que el pívot va a cobrar 32,4 millones y que es el más flojo de los cuatro fantásticos de Phoenix viniendo sobre todo de donde viene con sus decepcionantes playoffs.

Los Dallas Mavericks preguntaron por él pero de momento todo es una especulación. Ayton sigue en Phoenix, pero teniendo en cuenta el contexto no se puede descartar nada. De la misma manera que el año pasado se quedó por sorpresa podría irse por sorpresa.

7

Un contrato tóxico

Ben Simmons

El General Manager de los Brooklyn Nets, Sean Marks, apuntó hace dos días en declaraciones recogidas por Erik Slater que espera que el base de casi 27 años recupere el base All-Star y que la única diferencia entre el jugador que maravilló en Philadelphia y el jugador devaluado de la actualidad es la confianza. Así que el conjunto neoyorquino cierra filas en torno a él. 

Pero ya se sabe que, si algún lugar en el que las palabras se las lleve el viento, es la NBA. Como perfecto ejemplo reciente, lo del General Manager de los Warriors, Mike Dunleavy Jr, afirmando que Jordan Poole iba a ser clave en los cuatro próximos años en la Bahía para acabar traspasándolo a los Wizards. 

El insider de los Heat, Greg Sylvander, apuntaba la semana pasada que a Brooklyn le interesaría incluir a Ben Simmons en una posible operación de tres bandas con Miami y Blazers con Damian Lillard y su potencial llegada a la ciudad de Florida como protagonistas principales. 

Algo que ya muestra que en los Nets no descartan nada con Simmons, quien sólo jugó hasta octubre por una lesión y con dudas de que encaje en la reconstrucción del conjunto neoyorquino alrededor de Mikal Bridges enterrada la etapa de los grandes tríos con las salidas de Irving y Durant en febrero. Tal y como está ahora, el contrato del australiano es uno de esos que entra en la categoría de tóxico, con casi 80 millones a cobrar entre esta próxima campaña y la siguiente.

8

Posible sustituto de Smart…o Lillard

John Wall

El veterano base de casi 33 años es agente libre, pero podría protagonizar uno de los movimientos del verano. Sobre todo, teniendo en cuenta su decadencia y cuáles son las responsabilidades para las que está siendo testado. 

Wall viene de dos temporadas horrendas, sin jugar en la 21-22 porque no aceptaba otro rol en los Houston Rockets que no fuera el de titular y no aportar lo suficiente en los Clippers el año pasado para acabar saliendo en febrero. Aún así, y según acaba de reportar Kelly Iko en The Athletic, el base va a entrenar con Celtics y Blazers, interesados en verles. 

Menudo reto para sería para un Wall en declive tanto intentar sustituir a Marcus Smart en Boston como a Damian Lillard en Portland si finalmente ‘Dame’ sale traspasado.

9

Ojo con lo que podría dar a los Suns

Bol Bol

Otro agente libre después de ser cortado por los Magic y que en este caso podría significar un movimiento más importante del que se puede creer sobre el papel. Shams Charania ha apuntado que los Phoenix Suns le pretenden en lo que sería una jugada maestra tanto por inteligencia de la incorporación como por bajo coste por parte de los de Arizona.
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​Lo más parecido a Victor Wembanyama ahora mismo tanto por físico -2,18-, como por conjunto de habilidades, el hijo del legendario Manute Bol podría encajar a las mil maravillas al lado de los Durant, Booker y Bradley y se complementaría a la perfección por características y disposición a asumir un rol más reducido con Ayton. 

A sus 23 años, todavía le falta mucha consistencia, pero el pívot ya dio un paso muy importante el curso pasado en el aspecto físico al jugar 70 partidos, más que en las tres campañas anteriores juntas con los Denver Nuggets.

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Mucha incertidumbre con los españoles

Los Hernangómez: ¿La NBA por el Barça?

En clave de los españoles, todo queda por pasar todavía en el mercado, con sólo Santi Aldama y Ricky Rubio con plaza garantizada y un rol claro en Grizzlies y Cavaliers. 

Usman Garuba tiene garantizada una temporada más -con salario totalmente garantizada-, pero el reciente traspaso a Oklahoma después de que los Rockets le movieran a Atlanta añaden todavía más incertidumbre a su situación. 

Por su parte, Willy y Juancho Hernangómez apuntan a volver a Europa con el Barça como más probable destino por ahora. Aunque Juancho ha perdido mercado en la NBA tras ir de más a menos el pasado curso en Toronto -cortado en febrero-, a Willy parecería que le podrían surgir aún más oportunidades con la eficiencia demostrada estos años, pero jugar en el mismo equipo que su hermano sería definitivamente algo más ilusionante para él. 

Y también parece tener aún mercado NBA Serge Ibaka con su experiencia de anillo y su impacto en ambos lados de la cancha, pero el hispanocongoleño sigue como agente libre.