¡Eto'o baja al vestuario y suelta un rapapolvo a los jugadores de Camerún tras ganar!

¡Eto'o baja al vestuario y suelta un rapapolvo a los jugadores de Camerún tras ganar!

Samuel Eto’o (41 años), exdelantero del FC Barcelona entre 2004 y 2009, es el presidente de la Federación de Camerún desde el 11 de diciembre de 2021 y se toma el cargo muy en serio, tanto que sorprendió este jueves al bajar al vestuario para leer la cartilla a los jugadores que entrena Rigobert Song. Lo curioso del caso que su selección acababa de ganar 0-1 en Burundi con un gol de Toko Ekambi, ex del Villarreal que juega en el Lyon, en el arranque del Grupo C de clasificación para la Copa África. Pero no le gustó lo que vio y, manteniendo el espíritu indomable de su etapa como jugador, así se lo hizo ver a sus futbolistas.

El rapapolvo no tuvo desperdicio y fue grabado por la Federación, con amenazas a los jugadores, en general, de dejar de acudir a la selección si no mejoraban su actitud y su rendimiento.

“No estoy feliz, para nada. Representas a la selección de Camerún, y no me importa quién esté delante de ti, tienes que hacer el trabajo. Lloré durante varios años porque me perdí algunos Mundiales, pero sé el problema que tuve. Esto no va a pasar mientras yo sea presidente ”, comenzó  Samuel Eto’o en un vestuario expectante y silencioso.

Y prosiguió: “Tomé la presidencia para cambiar las cosas. Y tener un sitio en la selección va a ser caro. Nadie tiene un lugar garantizado en este equipo. El que quiera vestir la camiseta de Camerún debe hacer su trabajo cuando lo llamen, de lo contrario no jugará y yo estaré feliz. Jugaría con los niños… Yo lo daría todo, hasta mi vida para que estéis en las mejores condiciones y pelearé con todos. Tengo una gran admiración por mi país, nada es más hermoso que Camerún para mí, y llegaré a donde quiero ir contigo o sin ti. Si quieres ser parte de este viaje, tienes que moverte…”.

En las redes sociales, los cameruneses y los aficionados al fútbol en general han discrepado sobre si la intervención de Eto’o es digna de elogio, por su implicación en mejorar las cosas, o algo censurable por exhibicionista y por saltarse la figura del seleccionador.




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