Vuelve el Atlético de Madrid al escenario europeo, a la Liga de Campeones. Un escenario en el que olvidar el inconstante deambular de LaLiga en las últimas jornadas. El equipo de Simeone sólo ha logrado una victoria (contra el Mallorca), en las últimas seis jornadas del campeonato doméstico y en el último choque ante el Valencia, tras un nuevo revés, el Cholo envió un mensaje con destinatario incierto: “Se puede trabajar o buscar culpables, quién quiera trabajar se llevará bien conmigo”.
Está claro que no es el mejor momento de la campaña, con un arranque irregular que ha igualado el más flojo de la Era Simeone. Europa es un refugio en este sentido, tras dos buenos partidos en la fase de grupos, primero contra la Juventus, a la que fue capaz de igualar sus dos tantos de diferencia para empatar el partido; y luego con una victoria seria en Moscú ante el Lokomotiv.
Por ello, los dos partidos que ahora afronta el Atlético ante el Leverkusen, el equipo de la aspirina, puede dar el paso de gigante en su clasificación. Seis puntos de los seis posibles dejarían a los de Simeone en condiciones de certificar su presencia en los octavos de final de la competición y en disposición de pelear la primera plaza del grupo ante la Juventus.
El nuevo panorama también deja una duda en el aire. La lesión, esguince de tobillo grado II que sufrió Joao Félix este pasado fin de semana, obliga a Simeone a hacer cambios, a buscar un Atlético más parecido al del curso pasado.
Más allá de eso, el sustituto del luso parece que será Correa. Además de sin Joao Félix, Simeone no podrá contar con el otro de los lesionados, Stefan Savic, que se dañó en el parón con su selección. Por contra recupera a Vitolo, fuera en las últimas semanas por lesión muscular.
Junto a él, un once con las cuestiones remarcables de Herrera en el pivote junto a Thomas y Hermoso en el lateral izquierdo. Con la opción de que Koke pueda ocupar una suerte de enganche por detrás de Costa y Correa (4-3-1-2), en ataque y que se refugie en un 4-4-2 en defensa.
El Atlético, nuevamente, se hace fuerte en su condición de local. Sólo ha caído una vez en sus últimos 23 compromisos europeos en casa (18 victorias y 4 empates).
Si dudas tiene el equipo de Simeone por su actual marcha en la competición liguera, peor situación tiene el equipo alemán entrenado por Peter Bosz.
Los alemanes acumulan únicamente dos triunfos en sus últimos 15 partidos en la Champions League (ocho empates y cinco derrotas). El Leverkusen sufre una racha de tres partidos sin ganar (un empate, dos derrotas) y más extensivamente sólo dos triunfos en los últimos ocho duelos. Y en el partido previo al duelo del Metropolitano cayó por un contundente 3-0 frente al Eintracht de
Frankfurt. Un partido en el que Bosz cargó contra sus jugadores por la imagen dada en un momento difícil, con problemas de cara al gol, uno en las últimas ocho citas. El Bayer, ahora mismo, es noveno en la Bundesliga, está fuera de los puesto de Europa. “Necesitamos dar la sorpresa ya”, reconocía hace poco el director deportivo del club refiriéndose al doble duelo con el Atlético.
El preparador del equipo germano no podrá contar con Wendell para la cita en el Wanda
Metropolitano, lesionado muscularmente a última hora ni con Wendell, Aranguiz, Bailey y Sinkgraven, ambos también de baja.
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