Francia vivía frustrada por su meritoria pero a la vez insuperable regularidad que siempre le alejaba de los mejores, siempre eliminada en cuartos de final. Una y otra vez. Había sufrido tal maldición en las tres últimas ediciones de la Euro y en los cinco grandes campeonatos disputados desde 2013 entre Mundiales, Juegos Olímpicos y Eurocopas. Ève Périsset, con su gol de penalti al filo del descanso de la primera parte de la prórroga dio el pase a las francesas (1-0) contra Países Bajos y grabará su nombre como heroína gala que acabó con el hechizo. Francia se enfrentará con Alemania en semifinales el miércoles (21:00) tras superar el primer partido que se decide en la prórroga en esta Euro.
Países Bajos llegaba condicionada, sin la ex azulgrana Lieke Martens por lesión -baja ya para el resto de la Euro-, sin su portera titular, Sari van Veenendal, pero, por lo menos, con Vivianne Miedema, duda por Covid-19. La imagen que intentó transmitir el combinado de Mark Parsons al principio fue de fortaleza, presionando en bloque medio con convicción y registrando la primera ocasión con un remate de Beerensteyn blocado por Peyraud Magnin. Los 10 primeros minutos fueron de manejo de balón ‘orange’.
Pero transcurridos esos primeros 10 minutos, Francia, algo imprecisa al principio, empezó a mostrar la realidad, atrapando en su propio campo a una limitada Países Bajos mientras la selección gala exhibía una extensa exuberancia ofensiva, medida en varias situaciones claras de gol. En posicional, en transición y en juego directo, sacó oportunidades Francia, hallando amplitud con las proyecciones desde el lateral derecho de Périsset y encontrando profundidad con los movimientos de ruptura de sus interiores. La omnipresencia en punta de Malard, viniendo a recibir y cayendo a banda para apoyar y provocar superioridades fue de gran valor también para las ofensivas galas.
El equipo entrenado por Corinne Diacre lograba hundir pronto a Países Bajos hacia su área también mediante los duelos ganados en las segundas jugadas y cuando las extremos se metían dentro y tocaban de cara, otra provechosa opción para romper líneas y obligar a Países Bajos a meterse en el área. Cascarino, indescifrable por banda izquierda yéndose hacia dentro y hacia fuera, se aproximó al gol con un chut desde fuera de la frontal detenido por van Domselaar, pero cuando más cerca estuvo Francia del tanto fue en el tramo final de la primera mitad, con un palo de la misma jugadora del Lyon y un remate que sacó bajo palos Van der Gragt.
Países Bajos, tirando de un considerable derroche físico, sufría pero se defendía con acierto del agobio francés, aunque su actuación defensiva era más un ejercicio de milagrosa supervivencia que de solvente suficiencia. La presencia neerlandesa en campo rival también era escasa, mutando Francia de su 4-3-3 para atacar a un 4-4-2 para defender con el que lograba superioridad en el medio campo ante las tres medios de Países Bajos, sin salida por dentro ni éxito por fuera.
Roord insufla energía y claridad a Países Bajos
La entrada de Jill Roord en el descanso cambió del todo la apariencia de las neerlandesas, con las líneas más juntas, más fluidas con el balón y más frecuentes sus apariciones cerca del área. Francia, superada al principio por el ímpetu de las de Parsons, fue reestableciendo la tranquilidad tras el intento de alborotar el encuentro de Países Bajos. Bacha, primer relevo de Diacre tras entrar por Malard, forzó a intervenir con un potente disparo escorado a van Domselaar.
El partido se quedó en una fase de reposo con más posesión para una ofuscada Francia, adivinados ya todos sus movimientos por parte de un aplicado combinado neerlandés que, con las líneas más juntas y las ayudas más cercanas, pudo limitar la producción ofensiva del conjunto galo. Pero cualquier impulso de calidad podía iluminar a Francia y, a bocajarro, Diani marró un centro de Cascarino, habilitada por una elegante conducción de Bacha tras cruzar todo el campo. Todavía pudo evitar la futbolista del Lyon la prórroga con un disparo desbaratado a córner por van Domselaar, que repitió aparición milagrosa en un cabezazo de Renard.
Y llegó la prórroga y, con ella de la mano, ese tenso silencio dramático a la espera de ser rasgado por las sonrisas de unas y los llantos de otras. No hubo novedad hasta que, al final de la primera parte de ese tiempo extra, Janssen derribó a Diani dentro del área y no sin antes revisión del VAR se decretó penalti para añadir más tintes dramáticos a la escena. Lo convirtió Périsset y nada más sucedió hasta el estallido de júbilo de Francia, desprendida, por fin, de su maldito hechizo de cuartos.
Ficha técnica
Francia – Países Bajos, 1-0
Francia: Peyraud-Magnin, Renard, Toletti (Palis, 106’) Karchaoui, Geyoro (Matéo, 87’), Diani (Sarr, 106’), Malard (Bacha, 62’), Bilbault, Mbock Bathy, Cascarino, Périsset (Torrent, 106’).
Países Bajos: Van Domselaar, van der Gragt, Wilms (Egurrola, 115’), Beerensteyn (Roord, 46’), Spitse (Leuchter, 106’), Mledema, van de Donk (Brugts, 72’), Pelova, Groenen, Casparij (Nouwen, 106’), Janssen.
Gol: 1-0, Périsset (p), min 102.
Espectadores: 9.700 en el New York Stadium.
Árbitro: Ivana Martincic.