El entrenador del Eintracht de Frankfurt, el austríaco Oliver Glasner, señaló este martes, en la víspera de la final de la Liga Europa que disputarán el miércoles en Sevilla ante el Rangers de Glasgow, que “a lo mejor los jugadores no necesitan nada de él en estas horas previas porque están con muchas ganas”.
“Los veo tranquilos, bien en los entrenamientos y concentrados”, aseguró el técnico de conjunto alemán en la sala de prensa del estadio Ramón Sánchez-Pizjuán, escenario del partido al que acudió con toda la plantilla pero solo a pisar el césped ya que el entrenamiento había sido por la mañana en Frankfurt.
Glasner destacó que, para su equipo, “los partidos de Europa se han convertido en algo muy grande en los últimos dos meses” y que está “muy orgulloso” de sus jugadores tras haber llegado a esta final.
Preguntado por el Rangers, en comparación a rivales con los que se midió antes y del potencial del Barcelona o el West Ham, dijo que “ahora no se puede hacer ese tipo de cálculos” porque “los dos equipos que han llegado a la final es porque se lo merecen”.
“Hemos analizado al Rangers y es una mezcla del Barcelona y el West Ham. Mañana habrá que hacer una gran actuación. Estamos preparados, en buena forma y jugaremos con entusiasmo porque toda Europa tiene ganas de ver este partido”, resaltó.
Sobre el estado de forma de su centrocampista danés Jesper Lindstrom, lesionado en las últimas semanas, explicó que “esta bien, entrenó bien en los últimos días y está para jugar”, aunque reconoció que ahora debe decidir si lo hará “de titular o empezará en el banquillo”.
Glasner, sobre sus sensaciones de volver a España, donde ya eliminó este curso al Betis y al Barcelona, subrayó que ahora se vuelve para enfrentarse a un equipo que no es español.
“En un mes volveré otra vez a España de vacaciones. Me gusta España, las tapas. Sus estadios siempre están en magníficas condiciones”, añadió.
También se refirió a la afición que en masa se ha desplazado a Sevilla a ver al Eintracht y dijo que los seguidores de su equipo “son increíbles, los viajes que hacen, el ambiente que crean, es una de las cosas que no se puede medir. Mañana habrá aquí dos de las mejores aficiones”.