Hugo Mallo y Iago Aspas tumban al Athletic en San Mamés

El Celta ganó merecidamente en San Mamés a un Athletic que acumulaba tres victorias consecutivas como local. El equipo vigués, que hasta ahora no había ganado fuera de casa, supo aguantar a los leones hasta el descanso y rematarles en la segunda parte. Hugo Mallo y Iago Aspas fueron los autores de los goles de la victoria visitante.

Los rojiblancos empezaron bien, pero se vieron superados poco a poco con el discurrir de los minutos. Su portero Rubén, de hecho, apenas tuvo que intervenir a lo largo de todo el encuentro. Unai Simón, en cambio, no tuvo una de sus mejores noches.

Los celestes, con un fútbol muy dinámico del centro del campo hacia delante y con firmeza en defensa, supieron aguantar su momento para noquear a los locales. Los tantos gallegos llegaron, curiosamente, en el preciso instante en que Gaizka Garitano se disponía a hacer dos cambios. Chacho Coudet, en cambio, tiró de banquillo para pasar a jugar con una defensa de cinco con 0-1 a favor.

Athletic Club-Real Club Celta, en imágenes

Garitano afrontó la visita del Celta a San Mamés con prácticamente el mismo equipo que puso el liza en los dos últimos compromisos ligueros. El único cambio en la formación local vino dado por la baja por sanción de Iñigo Martínez. Unai Nuñez, renovado hace unas semanas hasta 2025, entró así en el eje de la zaga.

Coudet, por su parte, también aplicó el viejo dicho de que ‘lo que funciona, no se toca’. El técnico argentino repitió así la alineación que venía de derrotar al Granada en Balaídos. Los celestes aplicaron además su particular sistema de juego. Un 1-4-4-2 que bien podría interpretarse también, en función del poseedor del balón, como un 1-4-1-3-2.

El encuentro resultó muy igualado durante el primer tiempo. Cada conjunto jugó sus bazas tanto a nivel defensivo como ofensivo. Los bilbaínos, en medio de un tremendo aguacero, arrancaron con una presión muy adelantada, impidiendo la salida desde atrás de sus rivales. Mina, paradójicamente, tuvo la primera opción de cara a gol, pero Unai Simón acertó en el despejo.

La insistencia rojiblanca se tradujo en un remate de Muniain que salió fuera por poco. El Celta, pese a dejarse ver menos en ataque, dispuso de otra clara opción en un tiro muy ajustado de Olaza. Los leones siguieron intentándolo por medio de Vesga y Villalibre, pero se fueron al descanso con otro susto en forma de despeje fuera por poco de Nuñez contra su propia portería.

Yuri, a modo y manera de Getafe, tuvo que ser cambiado por problemas aparentemente respiratorios. Balenziaga entró en su lugar. Pronto quedó claro que el Celta había comenzado muy enchufado el segundo tiempo.

Denis, en plena avalancha viguesa, batió a Unai Simón, pero su gol fue anulado por fuera de juego previo de Aspas. El 0-1, sin embargo, no tardó mucho más en subir al marcador. Hugo Mallo, de cabeza, culminó una gran jugada de los visitantes a la hora de juego.

Unai López y Raúl García comparecieron acto seguido. La reacción de Coudet radicó en meter a Aidoo por Nolito para pasar a jugar con defensa de cinco. El Celta, lejos de meterse atrás, aumentó su ventaja tras un error en el saque con la mano de Unai Simón que aprovechó Iago Aspas, a pase de Brais, para firmar el 0-2.

Sancet y Morcillo entraron para tratar de remediar el descalabro bilbaíno en los minutos finales.

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