Iñigo
Martínez ha acabado fundido esta temporada, tanto física como mentalmente. Así lo reconoció ayer el propio protagonista en el comunicado que emitió en sus redes sociales para justificar su decisión de renunciar a la Eurocopa 2021.
El central de Ondarroa ha sido el futbolista de campo más utilizado en el Athletic en la temporada que finalizó este pasado fin de semana con la derrota ante el Elche en el Martínez Valero. Ha jugado un total de 3.010 minutos de competición, 2.525 de Liga, 300 de Copa y 185 de Supercopa. Y eso que se perdió cuatro partidos por una sanción completamente desproporcionada por el manotazo sobre Sergio León cuando ya había finalizado el partido del torneo de la regularidad ante el Levante.
Solamente hay un león que haya jugado más. Se trata de Unai
Simón (3.960), pero este dato es más normal en un puesto como el de portero que tiene menos desgaste físico. El de Murgia sí estará en la cita continental que se disputará entre el 11 de junio y el 11 de julio en diversos países europeos. El podio lo completa Iñaki
Williams (2.953), otro que ha acabado muy justo el curso. Tanto es así que reconoció ante los medios que le estaba viniendo bien salir en las segundas partes de los últimos encuentros para recuperarse sobre todo mentalmente después de las dos finales perdidas contra Real Sociedad y Barça.
Iñigo
Martínez ha disputado un total de 28 partidos ligueros, todos ellos de titular y ha marcado dos goles, los dos importantes. Anotó el 2-1 definivo contra el Atlético en San Mamés con un gran remate de cabeza tras el córner botado de forma magnífica por Ibai. Y también fue el autor del empate a uno con el Levante en la ida de la semifinal copera. Su remate con la testa tras un giro de cuello se coló en la meta granota para dejar abierta la eliminatoria que después se sentenció en el Ciutat de València para lograr el pase a la final de la temporada 2020-21.
Iñigo
Martínez ha sido un fijo tanto para Gaizka
Garitano como para Marcelino cuando ha estado disponible. Normalmente su pareja en el eje de la zaga ha sido Yeray, pero también ha jugado con Nuñez. Este desgaste lo ha notado en la recta final de la temporada. Tanto es así que no se ve con fuerzas para jugar una competición con el prestigio de la Eurocopa.
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