Es una leyenda, el futbolista en activo con más partidos en la Liga, la friolera de 536. Tiene 38 años, es un abuelo futbolístico, pero al mismo tiempo una de las principales amenazas para la Real este domingo. Joaquín
Sánchez es el octavo jugador en número de minutos en su equipo, en el que ha jugado 18 de los 19 partidos de este curso liguero, 14 de ellos como titular, ha marcado seis goles, tres de ellos en apenas 18 minutos ante el Athletic, y ha repartido dos asistencias. El abuelo, como todo Donostia, también se va de marcha. Acaba de renovar hasta 2021, por lo que se asegura jugar hasta los 40. Hay chistes para rato.
Lo que no es ninguna broma es su historial. 777 partidos como profesional entre la Liga, la Serie A italiana, todas las competiciones oficiales en las que ha tomado parte y la selección española, con la que disputó la friolera de 52 encuentros, con cuatro tantos. Lleva tantos años en activo que ya se ha enfrentado en 25 ocasiones a la Real, a la que también le ha marcado cuatro goles.
Su balance contra los txuri urdin es positivo: 10 victorias, siete empates y ocho derrotas, la última de ellas en el partido de la primera vuelta, en Anoeta (3-1), cita en la que el público donostiarra le dedicó un cántico haciendo alusión a su vena humorística: “Cuéntate un chiste, Joaquín, cuéntate un chiste…”. En sus 10 últimos enfrentamientos contra los txuri urdin se ha manchado un tanto su estadística, ya que sólo ha celebrado un triunfo, el afortunado del pasado curso en el Benito Villamarín: 1-0 con gol de Júnior. Vestido con la camiseta del Valencia, contó por victorias sus tres duelos ante los guipuzcoanos y con la del Málaga, una derrota en un partido (1-2).
Barrenetxea no había nacido cuando debutó
Hay datos curiosos como que cuando el Betis goleó 0-4 a la Real de Denoueix el 6 de 12 de diciembre de 2003, uno de los que intentará frenarle hoy, Aihen
Muñoz, tenía sólo seis años. Otra cosa curiosa es que cuando Joaquín disputó su primer encuentro oficial con el primer equipo del Betis, el 1 de octubre de 2000, en Segunda contra el Atlético de Madrid (1-1), Ander
Barrenetxea no había nacido aún. Ni siquiera cuando el del Puerto de Santa María se estrenó en Primera vestido de verdiblanco, el 26 de agosto de 2001. El donostiarra vino al mundo 27 de diciembre de ese 2001.
La Real fue su primer equipo
Otra curiosidad es que la Real fue el primer equipo del corazón de Joaquín. Todo se debe a que su padre, cuando era un rebelde infante, le regaló la equipación completa del equipo txuri urdin, por una explicación poco poética: “No había otra”. El caso es que el centrocampista le cogió cariño a esa camiseta, que tenía hasta el escudo bordado, y por extensión a la Real Sociedad
De hecho, la Real hizo una broma hace dos años en su cuenta de Twitter, alabando el “buen gusto” del aita del bético y prometiendo dos camisetas txuri urdin a sus hijas, “para no perder la tradición”. A todo esto contestó el community manager del Betis, con la guasa propia del lugar: “¿No estaréis intentando cubrir el puesto de Xabi
Prieto fichando a nuestra leyenda, verdad?”, lanzaron.
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