Jugar de local, un lastre más que una ventaja


La decisión de jugar los partidos sin público en las gradas de los estadios, como medida para evitar más contagios de coronavirus, ha quedado demostrado que es un gran hándicap para los equipos que actúan de local en lo que llevamos disputado de esta Liga exprés.



Para muestra, la recién finalizada jornada trigésimo tercera, que acabó este jueves con el partido Real Madrid-Getafe. En los diez encuentros disputados de la LaLiga solo tres de los equipos que jugaban en casa ataron el triunfo: el Mallorca que goleó al Celta por 5-1, la Real Sociedad que se impuso al Espanyol por 2-1 y el Madrid que venció por la mínima al Getafe (1-0).

En los siete restantes duelos, 5 triunfos visitantes y 2 empates.

No está siendo una anécdota que los locales pinchen en casa, sino una corriente habitual en esta reanudación del campeonato.

En primera jornada pots-confinamiento, la 28, en los diez partidos jugados al reiniciar el torneo, sólo ganaron tres equipos que actuaban como locales.

En la vigésimo novena, en sólo cuatro ocasiones venció el club que jugaba en casa. En la 30ª, de nuevo solo cuatro veces se colocó el signo del ‘1’ en la quiniela.

En la jornada trigésimo primera,
cuatro equipos vencieron jugando en casa.
Y en la 32ª , seis locales se llevaron el gato al agua y los tres puntos no volaron de casa, siendo la jornada hasta ahora más prolífica, en cuanto a triunfos locales se refiere.

Y ya llegamos a la última jornada, la 33ª que acabó el jueves, donde solo tres equipos certificaron la victoria en su estadio.

Ha quedado demostrado en esta Liga postconfinamiento que la afición sí da puntos y sí es el ‘jugador número 12’ pues casi todos los equipos han visto cómo se les escapaban puntos de sus estadios en esta reanudación. Ya no cotiza al alza jugar en casa.


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