Valtteri Bottas está sintiendo más calor que otras temporadas y sospecha que el nuevo mono negro del equipo Mercedes tiene algo que ver en ello.
Mercedes ha cambiado este año el color de sus bólidos y sus uniformes de plateado a negro en apoyo a la campaña contra el racismo del deporte y para enfatizar el compromiso del equipo para enfatizar la diversidad.
Después de sudar la gota gorda durante el Gran Premio de España del domingo, el piloto finlandés dijo a los periodistas que había perdido tres kilos durante la carrera.
“Este año todavía ha hecho más calor dentro del coche”, afirmó Bottas, a quien se escuchó por la radio del equipo quejarse sobre lo calientes que estaba su mono.
No conozco la diferencia real entre el negro y el blanco en términos de temperatura, pero este año ha hecho mucho calor en el coche
“Tuvimos que cambiar el color del mono y se sabe que el color negro absorbe más el calor, especialmente cuando el sol cae directo”, añadió Valtteri, en una posición delicada al disponer como Lewis Hamilton del mejor coche y, en cambio, ser superado otra vez por Max Verstappen (Red Bull), que marcha segundo en el Mundial de F1.
Bottas terminó tercero el domingo y ocupa esa misma posición en la general, ahora a 43 puntos de Hamilton, líder, seis veces campeón mundial y único piloto negro de este deporte.
“No conozco cifras ni hechos ni cuál es la diferencia real entre el negro y el blanco en términos de temperatura, pero este año ha hecho mucho calor en el coche. Y también hay una nueva homologación este año para los monos, por lo que son más gruesos y la ropa interior es más gruesa, así que no sé cuánto efecto tiene eso también”, insistió Bottas.
Bottas siente que los monos blancos serían más frescos y expresó su preocupación de que la incomodidad y la pérdida de peso pudieran afectar el rendimiento.
“Sé que soy uno de los pilotos más en forma, si no el que más, así que puedo soportarlo, pero nunca es cómodo y siempre hay cosas que podemos mejorar”, apuntó Bottas.
El director de estrategia de Mercedes, James Vowles, aseguró el mes pasado en Austria que el cambio de color no afectaba al rendimiento del coche.
“No podemos ver ninguna diferencia en las temperaturas de nuestro radiador u otras temperaturas de los sistemas centrales dentro del automóvil como resultado del color de la pintura externa”, explicó Wowles.
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