La ‘Cuarta’ del Real Madrid llegó tras sudar tinta ante el Atlético


El 3 de junio de 1959, hoy hace 61 años, se revivió la final de la primera edición de la Copa de Europa entre el Real Madrid y el Stade de Reims francés. En el conjunto de Albert Batteux estaba Just Fontaine, el delantero internacional galo que marcó 13 goles en el Mundial de 1958, y los merengues volvieron a levantar el título, el cuarto consecutivo, en Stuttgart. Se adelantaron pronto con un gol de Mateos y, tras el descanso, Di Stéfano marcó el 2-0 definitivo e hizo realidad la ‘Cuarta’.



El equipo blanco llegó de nuevo como campeón a la máxima competición continental y le acompañó el segundo de la Liga, en esta ocasión el Atlético de Madrid. 27 inscritos en total, pase directo a octavos y dos rivales teóricamente fáciles de entrada para el Madrid: el Besiktas y el Wiener SC. Pero los turcos plantaron cara en el Bernabeu, donde sólo cayeron por 2-0 y con un gol en el minuto 90 de Raymod Kopa. En la vuelta, los blancos se adelantaron con una diana de Santisteban y Köstepen estableció el insuficiente y definitivo 1-1.

El Wiener SC, rival del Madrid en cuartos de final, firmó un esperanzador 0-0 en la ida en tierras austriacas, pero en la vuelta en Chamartín cayó por un estrepitoso 7-1. A pesar de que Horak hizo el empate a uno en el 9’ e hizo soñar durante unos minutos al equipo vienés, Di Stéfano les hizo despertar de forma abrupta con cuatro goles, una fiesta a la que se unieron los tantos de Mateos, Rial y Gento.

El Atleti habría pasado con la norma de los goles en campo contrario

En ‘semis’, el Madrid tuvo un cruce complicadísimo: el Atlético, lo que aseguraba un finalista español. Dos partidos duros que forzaron un desempate. La norma de los goles de campo contrario habría clasificado a los rojiblancos, que cayeron en la ida en el Bernabéu (2-1). Chuzo adelantó a los colchoneros, pero Rial y Puskas, de penalti, voltearon el marcador. En la vuelta, en un derbi de mucha tensión y nervios disputado en el Metropolitano, el Atleti venció por 1-0 gracias a un tanto de Enrique Collar al borde del descanso.

El desempate se jugó en La Romareda de Zaragoza y se impuso el Madrid por un ajustado 2-1. Di Stéfano inauguró el marcador, Collar puso la igualada casi de inmediato tras un error del meta Domínguez y Puskas, con un fuerte disparo, dio el pase a los blancos a su cuarta final consecutiva. El Stade de Reims, un viejo conocido con el que se reeditaba la final de 1956, no fue rival de talla para las estrellas merengues.

El Madrid vuelve a dejar al Stade Reims con la miel en los labios

Tras haberse coronado campeón en París, Madrid y Bruselas, el Neckarstadion de Sttugart vio cómo el equipo blanco, que no pudo contar con Puskas por lesión, se convertía en tetracampeón europeo y volvía a dejar a los franceses con la miel en los labios. Mateos hizo el 1-0 en el primer minuto de partido y falló después un penalti ante Dominique Colonna que le había ‘cedido’ su compañero Di Stéfano, artífice del 2-0 final en los comienzos de la segunda parte, en la que Kopa jugó lesionado. Cuatro ediciones y cuarta Copa de Europa para un Real Madrid que iba engordando su leyenda.

Real Madrid, 2: Domínguez; Marquitos, Santamaría, Zárraga, Santisteban, Ruiz; Kopa, Mateos, Di Stéfano, Rial y Gento.

Entrenador: Luis Antonio Carniglia

Stade Reims, 0: Colonna; Rodzik, Jonquet, Giraudo; Penverne, Lamartin; Bliard, Leblond, Fontaine, Piantoni y Vincent.

Entrenador: Albert Batteux

Árbitro: Albert Dusch (Alemania)

Estadio: Neckarstadion de Stuttgart (72.000 espectadores)



Source link