La clasificación de la selección de Marruecos para los cuartos de final del Mundial a costa de España, a la que venció en la tanda de penaltis tras acabar el partido y la prórroga con empate sin goles, provocó la celebración masiva por parte de la comunidad marroquí presente en España.
Y pese a los temores de que estos festejos, de darse, pudieran provocar incidentes de orden público como los registrados en Bruselas tras la victoria del equipo africano ante los de Bob Martínez, lo cierto es que no se produjeron problemas de orden público en ninguna ciudad española.
Las autoridades consulares marroquís, así como otras de índole municipal o autonómico españolas, habían hecho llamamientos durante los días previos al partido en la necesidad de mantener la calma en todo momento, fuera cual fuera el desenlace del choque entre España y Marruecos.
Tras la tanda de penaltis, en numerosas ciudades españolas, entre ellas Madrid y Barcelona, hubo explosión de júbilo entre los integrantes de la comunidad marroquí.
En Barcelona, un numeroso grupo se reunió en la fuente de Canaletes, con banderas marroquís, bengalas y entonando cánticos de celebración pero sin que se registraran incidentes de importancia.
Y así en el resto de localidades en las que los aficionados del cuadro africano salieron a la calle para mostrar su alegría por la clasificación de su país para cuartos de final.