"La gente quería volver al trabajo el lunes para hablar con orgullo de la Real"

"La gente quería volver al trabajo el lunes para hablar con orgullo de la Real"

Sander Westerveld recuerda con inmenso cariño su estancia en la Real Sociedad, aunque resultó un tanto efímera. Disputó 82 encuentros, en los que encajó 110 goles entre el 22 de diciembre de 2001 hasta el 23 de mayo de 2004, periodo en el que fue subcampeón de Liga con la Real Sociedad. “Esa temporada fue el mejor año de mi carrera”, dice al arquero tulipán de 47 años en una entrevista para la revista ‘Staantribune’ de su país. 

Fue un año feliz en Gipuzkoa, en el que los problemas parecían menos para unos seguidores realistas que acariciaron hasta la última jornada la posibilidad de celebrar un título de Liga 20 años después. Westerveld es muy gráfico en el relato de aquella imborrable 2022/03: “San Sebastián floreció gracias al desempeño de la Real Sociedad, indica el portero. “Cada vez se exhibían más bufandas, camisetas y banderas en los balcones y nos vitoreaban en la calle. Una de las cosas más lindas que encontré fue una columna de un periodista local titulada ‘Nunca más lunes’ . Antes, casi nadie en San Sebastián esperaba con ansias el lunes: el comienzo de la semana laboral o la escuela. Habían tenido el fin de semana y ya estaban deseando que llegara el viernes. La gente quería volver al trabajo o a la escuela el lunes para hablar con orgullo de la Real. Es genial que como club de fútbol puedas desatar algo así”.

Las camisetas que envejecen

Westerveld conserva alguna de sus camisetas de entonces en su casa de Hilversum y también y una de Darko Kovacevic, aunque se les está cayendo la publicidad.  Sus recuerdos se le agolpan cuando echa la vista 20 años atrás. Reconoce que “me fastidió mi salida del Liverpool”, ganador de cinco títulos el curso anterior, y se felicita de  haber coincidido con el preparador de porteros que le adiestraba: “Trabajé con el mejor entrenador de porteros que he conocido: Xabier Mancisidor . Ahora está con Pep Guardiola en el Manchester City. Si lo hubiera experimentado cinco años antes, podría haber sacado más de mí mismo”. Y es que, a su juicio, “he tenido entrenadores de porteros que leen todo de un libro. Mancisidor tenía ejercicios personalizados. Gracias a él aprendí a dar un paso intermedio en los tiros libres. De esa manera llegué treinta centímetros más adentro de la esquina. Mancisidor también estudiaba los penaltis”.

El arquero holandés recuerda que le paró un penalti a Fernando Torres, que hizo hincar la rodilla al Madrid de los galácticos en Anoeta (4-2) y que también derrotó en Anoeta al Barcelona de Louis van Gaal y sus compatriotas los De Boer, Kluivert, Overmars y Cocu“. 




Source link