La lucha del embajador txuri urdin en Holanda

Se llama Henk
Parhan, es holandés, oficial de la marina jubilado, en 2020 cumple 72 años y es un acérrimo seguidor de la Real. Pero no se conforma con eso. Ha ido ganando adeptos a la causa txuri urdin por el país tulipán luciendo siempre el escudo coronado del equipo que desde hace 17 años lleva en el corazón, la Real. Y es que este apasionado del fútbol era y es un feligrés del Ajax de Amsterdam, pero su pasión se desdobló desde que su hijo, Ben, otro irreductible forofo txuri urdin, recaló en Donostia en 2003. Ambos se encargan de ser los embajadores realistas en los Países Bajos, donde hasta existe una peña no oficial de la Real.

Henk ha mudado del teletexto -qué sufrimiento- a la televisión en directo para seguir los partidos de su Real. Su corazón se inundó de alegría en las ocasiones en las que pudo venir a Anoeta y celebrar goles junto su vástago, Ben, por ejemplo en aquella victoria por 3-1 al Barcelona tan espectacular de la Real de Jagoba
Arrasate. Hasta hace un tiempo, no esperaba a que su hijo llegara a casa tras los partidos de Anoeta para llamarle por teléfono y compartir la alegría por una victoria, la decepción por una amarga derrota y por preguntar hasta por el más nimio detalle sobre el ambiente, la actuación de un jugador… Ben ya estaba charlando con su progenitor sin haber abandonado su butaca o bajando las escaleras del estadio.

Si en Holanda hay más gente que sabe qué es la Real o que incluso la sigue y desea sus victorias es, en gran parte, gracias a la pasión de Henk, que ha hecho un gran proselitismo en la tierra de los tulipanes. Siempre luce alguna prenda de la Real, un chándal, una camiseta, un gorro, una bufanda, un abrigo…Y el exoficial de la marina siempre dedica un tiempo a explicar a quién se lo pregunta por qué ama a la escuadra guipuzcoana, lo maravillosa que es la ciudad donde reside su hijo y lo buenos que son algunos de sus jugadores. Xabi
Alonso, Mikel
Aranburu, Valery
Karpin, Xabi
Prieto y Carlos
Vela fueron sus favoritos.

Conoció a Vela y Arconada

De hecho, tuvo la ocasión de conocer al gran Carlos
Vela durante la fiesta de inauguración de Maite Taldea, de la que es Presidente de Honor, distinción de la que presume con orgullo y que le concedieron por su esfuerzo y lealtad a los colores azul y blanco. Hubo, no obstante, otra persona a la que estrechó la mano aquella tarde, que le dejó marcado. Don Luis Arconada Etxarri. Inolvidable el día en que echó andar la peña que fundó su hijo Ben.

Hace unos años, Henk pudo sobrevivir primero a una perforación intestinal provocada por un tumor y luego a un ictus severo, que le dejó secuelas. Tras medio año de intensa lucha en un centro de rehabilitación, logró su objetivo, más bien obsesión, de volver a casa. Durante ese medio año fue un ejemplo de fortaleza, resistencia y de mentalidad, incluso terminó animando a los otros pacientes del centro. Y siempre con un chándal txuri urdin en cuya espalda figuraba en grande el nombre del equipo de sus amores: Real Sociedad. Karpin había sido una inspiración para él; pero su batalla diaria fue incluso más intensa que el proceder del ruso en el campo.

Hank Parhan, aficionado de la Real en Holanda
Hank Parhan, aficionado de la Real en Holanda

Henk reside ahora en su domicilio de Holanda y sigue a la Real con el mismo ardor que en los últimos 17 años. Necesita ayuda permanente de especialistas en fisioterapia, terapia ocupacional y logopedia, no puede mover el brazo derecho, siempre en cabestrillo, y apenas habla, pero el corazón lo tiene intacto. Y la pasión por los suyos, nietos incluidos, también. Les escucha y se las ingenia para hacer entender. Quizá ya no puede expandir como antes su amor a la Real por Holanda, pero lo sigue sintiendo. Y siempre lleva encima algo con el escudo coronado de los txuri urdin. Vaya crack.


Source link