“No se encuentra con el gol, que es lo que necesita. Está trabajando como siempre, para lo que requiere el equipo”, decía Diego Simeone, entrenador del
Atlético de Madrid
, el pasado domingo sobre el momento de Álvaro Morata, frente a su peor racha como rojiblanco sobre la portería contraria, sin gol en cada uno de los últimos ocho encuentros oficiales que ha disputado.
Es una necesidad en ambas direcciones. Morata necesita el gol y el Atlético necesita sus goles. Nadie ha marcado más que él en esta temporada dentro de la plantilla que dirige el técnico argentino. Sus diez tantos en 30 choques, 26 desde el once, representan casi un cuarto de los que ha logrado su equipo en toda la campaña (un 23 por ciento) y entre todas las competiciones: 42.
No marca desde el pasado 9 de enero, en la semifinal de la Supercopa de España contra el Barcelona en Arabia Saudí, cuando anotó el 2-2 desde el punto de penalti en el minuto 82. Desde entonces, el ‘9’ no ha batido a ningún guardameta rival. Ni contra el Real Madrid (0-0 y 1-0) ni contra el Eibar (2-0) ni contra el Leganés (0-0) ni contra el Valencia (2-2) ni contra el Liverpool (1-0) ni contra el Villarreal (3-1) ni contra el Espanyol (1-1).
En ese tramo de partidos sin tantos de Morata, a los que hay que añadir los duelos contra la Cultural Leonesa en la Copa del Rey (2-1) y el Granada en la Liga (1-0) -el atacante no jugó por rotación el primero y fue baja por lesión en el segundo-, el equipo rojiblanco se quedó a cero en cuatro encuentros y sumó nueve goles en los otros seis duelos: tres de Correa, dos de Saúl y uno de Thomas, Koke, Saúl y J
oao Félix.
Aunque su transcendencia va más allá de los números que presente sobre la portería contraria, por todo lo que le aporta al equipo en cuanto a despliegue, velocidad, movilidad, desmarques, lucha, competitividad y verticalidad, ya sea en ataque o en defensa, cuando inicia él la presión de su conjunto, ya son 682 minutos, tiempos añadidos incluidos, sin gol para el mejor goleador de la temporada del conjunto rojiblanco.
Y con lo que eso supone para un equipo que ha tenido tantos problemas en ese sentido en esta campaña, porque el Atlético sólo ha marcado 42 goles en 36 encuentros oficiales en este ejercicio.
A los diez de Morata sólo se acercan los siete de Correa o los cinco de Joao Félix; en el caso del portugués por debajo de las cifras esperadas sobre la portería rival, como también Diego Costa, con sólo dos dianas en 17 encuentros este curso.
LA MIRA SOBRE EL SEVILLA
Mientras, se acerca ya de forma inminente un tramo definitivo: el duelo del próximo sábado contra el Sevilla en el estadio Wanda
Metropolitano, por las cuatro primeras posiciones de la Liga, y la visita al Liverpool el miércoles que viene en la Liga de Campeones, por alcanzar los cuartos de final de la competición.
El Atlético ya prepara el primero de esos compromisos fundamentales contra el conjunto andaluz, con sólo dos bajas (Thomas Lemar, por una lesión muscular y por tercer choque seguido, y Thomas
Partey, por ciclo de cinco tarjetas amarillas) y con el once ya definido por Diego Simeone.
Ya disponibles desde el entrenamiento de este jueves Kieran
Trippier y Renan
Lodi, que habían seguido un plan de trabajo específico para dosificar cargas durante las dos primeras sesiones de la semana, el técnico contó con ambos en los laterales derecho e izquierdo en los ensayos del probable equipo titular.
La portería será para Jan
Oblak; el centro de la defensa para Stefan Savic y Felipe Monteiro -José María Giménez encadenará su quinto encuentro seguido sin ser titular, tras superar una lesión muscular-; el medio campo para Ángel Correa, Marcos Llorente, Saúl Ñíguez y Koke Resurrección; y la delantera para Joao
Félix, de vuelta a la alineación inicial un mes después, y Morata, que compite contra su peor racha con el Atlético.
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