“La política de Trump hacia los latinos es inhumana y antiamericana”



Janet Murguía (Kansas, 1960) lleva 14 años defendiendo los derechos de los latinos al frente de UnidosUS (antes, Consejo Nacional de la Raza), el mayor lobby latino de Estados Unidos. Recientemente, invitada por la Fundación Consejo España-EE UU, pasó por Madrid para hablar de la situación migratoria y no tuvo pelos en la lengua a la hora de criticar al presidente estadounidense Donald Trump.
Pregunta. ¿Cómo está viviendo la actual crisis migratoria entre EE UU y México?
Respuesta. Es una crisis humana, pero no de seguridad nacional. Estoy muy disgustada porque el presidente Trump ha escogido fabricar esta crisis para presentarla como un asunto de seguridad nacional y utilizar el miedo y la demonización con fines políticos. Creemos que no puede haber una solución a esta crisis mientras solo se hable de la frontera y del muro, veremos tiempos difíciles y mucho más miedo en la comunidad latina de Estados Unidos mientras no se trate como un asunto de política exterior que tiene implicaciones domésticas. Utilizando el miedo, como resultado de la retórica y de la política presidencial, se ha incrementado la inmigración, en vez de hacerla decrecer. Nos duele mucho que esta Administración haya adoptado una política cruel que ha separado a bebés y a niños de sus padres. Es una política inhumana y antiamericana. Vamos a unir nuestros esfuerzos, junto a otras organizaciones, para acudir a los tribunales y tratar de parar estas medidas. Unos 2.000 niños, incluso más, han sido apartados de sus familias y hay 10 ciudades en las que ha habido redadas de deportación de migrantes. Nuestro último informe dice que hasta seis millones de niños, que son ciudadanos estadounidenses, con al menos uno de sus padres indocumentados, corren un grave riesgo. Es una amenaza directa contra muchas de nuestras familias y nuestras comunidades en todo el país. El problema de la frontera es solo la punta del iceberg.
P. Hace días, 250 niños fueron liberados de un centro de detención en Texas en condiciones infrahumanas. ¿Habrá más casos?
R. Sí. Nos hemos manifestado a las afueras de estos centros, trabajamos con muchas organizaciones en la frontera. Estuve hace dos semanas en San Isidro, en San Diego, donde hay centros para recibir a estos inmigrantes, una vez que han sido liberados, y se les orienta y ayuda para que se pongan en contacto con sus familias y estén en un sitio confortable y seguro. Hay mucha gente que está deseando ayudar y recibir a estas familias, pero cuando están detenidos hay poco que podamos hacer… protestar, apelar en los tribunales y ejercer presión pública. Es casi increíble que hayamos llegado a esta situación.
P. ¿Es el peor momento para ser latino en Estados Unidos?
R. Estamos siendo atacados por el propio presidente. Estamos viendo cosas nunca vistas en nuestra historia reciente. Pero es una realidad y es desafortunada porque creo que nuestro país va a retroceder. Pero luchamos porque se oiga [TEX]nuestra voz.
P. Quedan pocas semanas para que se cumpla el ultimátum lanzado por Trump a México sobre la crisis migratoria. ¿Cree que México tiene capacidad para cumplir con el acuerdo?
R. No creo. Veremos esfuerzos temporales por parte de México para calmar la situación, para aplacar al presidente, pero creo que será difícil para el país sostener ese compromiso durante un largo periodo de tiempo. México tiene un gran interés en seguir trabajando con esta Administración porque la negociación comercial es vital para el futuro de su economía. Pero al mismo tiempo, Andrés Manuel López Obrador dijo en su campaña electoral que su Gobierno sería autónomo en la relación con EE UU y que iba a proteger los derechos humanos de los mexicanos y de los latinoamericanos. Están ahora mismo en un cruce de caminos y nadie sabe lo que va a pasar. Pero creo que medidas como el envío de la Guardia Nacional solo van a tener un efecto temporal.
P. Muchos expertos temen que las fronteras de México se conviertan en enormes campos de refugiados… ¿Siente lo mismo?
R. Sí. En la frontera norte ya hay campos de refugiados. Y por eso digo que no va a ser sostenible para México. Sufrirán una gran presión para que muevan a esa gente y también verán grandes cambios en su territorio. Habría que intentar que esta Administración colaborase con los Gobiernos de Centroamérica, que son la fuente de la migración, y hablar con ellos de soluciones más amplias, pero no hay ningún esfuerzo real por hacer eso.
P. ¿Cómo es su relación con la Administración Trump?
R. No tenemos. Ataca a nuestra comunidad a diario. Hemos tratado de buscar oportunidades para trabajar con ellos, pero, para ser honesta, no hay en este momento ningún punto en común entre ellos y nosotros. ¿Cómo podría haberlo? Desde luego, no en lo que respecta al muro, no en la separación de familias, no en los seis millones de niños que se arriesgan a perder a sus padres, no en privar a cuatro millones de latinos de asistencia sanitaria, no en las políticas de vivienda hacia los migrantes indocumentados… ¿Sobre qué asunto podemos sentarnos y hablar?
P. ¿Cree que Trump será reelegido en 2020?
R. Nadie puede asegurar qué va a pasar. Pero lo cierto es que vamos a asegurarnos que los votantes latinos conozcan las posturas de los candidatos sobre los temas relacionados con nuestra comunidad y el futuro del país. Tenemos un importante trabajo que hacer para incrementar nuestro poder político, para hacer crecer el voto latino y que se movilicen para votar en las elecciones, no solo en las presidenciales, sino en las locales y estatales. Tenemos que estar presentes donde haya más oportunidades de hacer algo. Por ejemplo, en California, Texas y Florida, esos tres Estados representan el 50% de la población latina, pero hay otros como Arizona, Nevada, Pensilvania, Colorado donde hay muchos latinos.


Source link