Está demasiado reciente y escoció demasiado como para olvidarlo. La Real Sociedad afronta el partido del domingo contra el Real Madrid en Anoeta todavía dolida por lo sucedido el pasado 21 de junio contra el mismo rival y en el mismo escenario desangelado, plagado de asientos desocupados. Merced a un atropello arbitral que es tan clásico como el fútbol por estos lares, los txuri urdin capitularon contra el equipo merengue (1–2), que aquel día y con esos tres puntos se auparon a un liderato del que ya no descabalgarían. El poder obtener el primer triunfo del curso es ya un aliciente per se, pero el hecho de tener enfrente al campeón de Liga y el recuerdo reciente de ese sangrante precedente llenan el depósito de motivación de una Real en la que puede debutar David
Silva.
Los realistas buscan la ‘vendetta’ ante los blancos, conscientes de que el colegiado, ante cualquier duda, siempre se decantará a favor del más poderoso. Y más teniendo en cuenta que la Real Federación Española de Fútbol, en una decisión cuanto menos discutible, ha designado como colegiado del encuentro de este domingo a Juan Martínez
Munuera, que no es otro que el encargado del VAR en aquella noche aciaga arbitral del pasado 21 de junio, en el que siempre arrimaron el ascua a la sardina de los blancos. La presencia de González
Fuertes en la sala de videoarbitraje tampoco aporta tranquilidad a las huestes guipuzcoanas.
Siempre a favor del Madrid
La parroquia txuri urdin recordará que en las cuatro acciones polémicas que existieron en aquel partido de hace tres meses, Estrada
Fernández y su colaborador en la Sala VOR, Martínez
Munuera, decidieron a favor del Real Madrid. Casemiro pudo ser expulsado por un codazo que pudo ser voluntario a Merino con 0-0, pero sólo vio la amarilla. El 0-1 llegó en un penalti convertido por Ramos tras un lance entre Llorente y Vinicuis en el que apenas se aprecia contacto del realista. Januzaj consiguió el que iba a ser el 1-1 con un certero disparo desde fuera del área, gol anulado por un fuera de juego posicional de Merino, que no intervino en la jugada pero que a juicio del árbitro interfería en la visión de Courtois. Y además Benzema pudo controlar con la mano en la jugada del 0-2. Una actuación colegial demasiado tendenciosa.
6/20 victorias con M.Munuera
Lo paradójico en este caso es que con Juan
Martínez
Munuera, la Real ha obtenido sus dos únicos triunfos contra el cuadro merengue desde el ascenso: los brillantes 4-2 de la temporada 2014/15 y 3-1 de la campaña 2018/19.
No obstante, la estadística de la Real con Martínez
Munuera no es muy halagüeña. Les ha pitado en 20 ocasiones en partido oficial, con un balance de seis victorias, cinco empates y nueve derrotas. En las dos últimas ocasiones en las que el trencilla de Benidorm y la Real han unido sus destinos, la derrota cayó del lado guipuzcoano con ‘performances’ arbitrales cuanto menos polémicas. Pitó en la derrota (1-0) contra el Barcelona de la jornada 27 del pasado 7 de marzo, facturada por un penalti más que dudoso por mano de Le
Normand. También dirigió el choque ante el Granada (2-3) en Anoeta de la jornada 35, con aquel codazo de Germán Sánchez a Mikel
Oyarzabal dentro del área con 2-2 no penalizado con penalti.
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