Laia Sanz fue una de las estrellas que formó parte de la presentación oficial del Dakar 2023, este jueves en París. La piloto catalana, tras 11 ediciones consecutivas acabando el Dakar en moto, emprendió su nuevo reto de las cuatro ruedas en 2022 con su primera participación en coche con Mini X-Raid. Finalizó en el 23º lugar, remontando en la parte final del Rally después de verse perjudicada por cuestiones ajenas como el polémico orden de salida de la pasada edición, que le hizo rodar en varias etapas al inicio con mucho polvo y vehículos más lentos delante. La piloto de Corbera de Llobregat tenía le ‘handicap’ además no solo de tener que aprender a marchas forzadas en su debut, sino de pilotar un 4×4 T1, un tipo de vehículo con prestaciones muy inferiores a la de los T1+ y los muchos buggies que había en carrera, que tenían más recorrido de suspensión y ruedas más grandes. Este año, tras el aprendizaje de 2022, Laia Sainz da un paso adelante con un T1 de dos ruedas motrices, el Astara 01 Concept del Astara Team, que le permitirá progresar mucho en cuanto a rendimiento en el desierto.
Será una carrera más dura, con muchísima duna y de más días, ingredientes perfectos para que Laia Sanz siga brillando. Así lo espera la propia Laia, quien se plantea el objetivo de “progresar” y quizás “estar entre los 15 mejores” en coches pese a la mucha competencia que habrá este curso. Además de los 10 o 15 pilotos que siempre están en todas las quinielas para ganar etapas, Laia deberá enfrentarse a decenas de buggies de otras estructuras y unos 40 vehículos que han dado el salto a T1+.
“El Dakar 2022 fue una aventura. La verdad es que tenía ganas de dar el paso a las cuatro ruedas. Y aunque fue complicado porque la primera semana tuvimos que salir desde bastante atrás, aprendimos mucho. Este año con el pasito que hemos dado en cuanto a coche, creo que lo podemos hacer mejor que el año pasado”, apuntó Laia en la presentación del Dakar 2022.
“Quería mejorar”
“Quería mejorar, dar un paso delante. Y con este coche he hecho un gran paso adelante. El estilo de conducción es muy diferente y las dunas quizás es lo que más asusta, pero va muy bien, es cuestión de cambiar un poco la mentalidad de afrontar las dunas de manera distinta. Todo el ‘pack’ es mucho más competitivo que el año pasado. Tengo muchas ganas porque cuando probé el coche me dio muy buenas sensaciones”, añadió Laia, estableciéndose ya un ambicioso objetivo.
“¿Un objetivo? No es fácil por el súper nivel que hay en coches hoy día, pero el objetivo siempre es mejorar. En 2021 fui la 23ª. Sería entrar entre los 15 primeros, quizás. Sé que es muy difícil, pero he dado un gran paso adelante respecto al año pasado, tanto a nivel personal, de conducción, como a nivel de coche. Así que lo intentaremos”.