La 27ª jornada de Liga se cierra en el Benito Villamarín con el partido estrella del fin de semana. El Real Madrid, que reestrena su condición de líder tras recuperarlo en el Clásico, quiere lograr una línea regular de resultados para mantener esa primera plaza hasta el final de la jornada 38. Un reto que parece complicado, habida cuenta de la irregular línea de resultados que ha seguido durante toda la temporada. Se verá las caras ante otro equipo que, en su contexto, también peca de ser capaz de lo mejor y de lo peor dependiendo de cómo salga el sol. Porque el Betis de Rubi es un equipo con talento, ya que no todos los equipos de España tienen en nómina a Canales o Fekir. Pero es muy endeble en la parcela defensiva. Ahora mismo, la situación es muy crítica para los verdiblancos, en especial para su entrenador, que podría terminar cesado si no convence y puntúa frente a los blancos y al Sevilla la próxima semana. Solo una victoria en los últimos diez partidos ligueros es un botín muy escaso para un equipo que quiere entrar en Europa, objetivo que ahora mismo está a 13 puntos. Más lejos que el descenso, que queda a ocho. Y no parece que el Madrid sea el mejor oponente ante el que alcanzar el vuelo, pero esto es fútbol.
Source link