Lo que bien empieza, bien acaba. No se puede quejar el Athletic de este primer enfrentamiento copero. Buen ambiente para los peñistas de la zona, buen estadio para practicar el fútbol y un rival amable a más no poder dentro y fuera del terreno. A los de Garitano les duró el Intercity menos de un minuto.
Lo de menos para el conjunto local era pasar esta eliminatoria. Ellos querían disfrutar de la experiencia de medirse a un histórico de Primera, aunque no renunciaban a nada antes de que empezase a rodar el balón. Luego, cuando el árbitro cogió el cuero en sus manos para pitar la finalización de cada tiempo, el objetivo común de los locales radicó en conseguir alguna camiseta de los visitantes.
Las últimas visitas coperas del Athletic a tierras alicantinas, siempre en eliminatoria a ida y vuelta, se saldaron con mejores resultados que impresiones en clave rojiblanca. Iraizoz, por ejemplo, sufrió una grave lesión muscular en el envite del equipo de Caparrós frente al entonces Hércules de Andoni Goikoetxea, Javi González y Sendoa (temporada 2007-2008). Este último, actual delegado del primer equipo rojiblanco, vio la roja en un choque en el que los blanquiazules se pusieron 2-0 en el marcador hasta que Yeste sacó su guante de seda para que Llorente y Del Horno firmasen las tablas.
Años más tarde (2014-15), con Valverde de entrenador, a los leones les tocó medirse al Alcoyano. Los locales, haciendo bueno el viejo dicho referente a su imperdible moral, mandaron en el marcador hasta que Viguera empató en el tiempo de descuento. El propio delantero del conjunto bilbaíno firmó también el tanto de la clasificación para la siguiente ronda en San Mamés.
El Intercity, tercer clasificado del grupo VI de Tercera, grupo que comanda curiosamente el Alcoyano, afrontó la visita de los leones al Martínez Valero, de Elche, como si de una fiesta se tratara. El propio Salvador Martí, presidente de este moderno y cada vez menos modesto club de Sant Joan, reconocía este extremo a MD en los aledaños del estadio ilicitano al mismo tiempo que, jaleado por uno de sus directivos, avisaba de que “hay partido, hay eliminatoria”.
Aitor Elizegi, que aprovechó las horas previas al duelo para reunirse con diferentes peñas del Athletic de esta zona del Mediterráneo, regaló una camiseta rojiblanca dedicada al presidente rival y a la vez amigo antes de que los dos equipos pisaran el césped. Javi Barajas, utillero del equipo local nacido en Portugalete e hincha confeso del Athletic, como era de esperar, posó junto a ambas delegaciones. El buen ambiente imperó desde horas antes del choque en la ‘fan zone’ instalada al efecto en el exterior del Martínez Valero. Photocall, carraca rojiblanca, banderitas con los escudos de ambos clubes, música… La entrada, pese a todo, fue sensiblemente inferior a la pronosticada de antemano. 4.971 y punto.
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