“Los extranjeros están para marcar la diferencia”


Los seis fichajes de fuera contratados por la Real se pueden mirar en el espejo que quieran. Están en el derecho de apoyarse en el ídolo que consideren, pero en el club existe una incuestionable referencia que en su día predicó con el ejemplo de lo que significa ser extranjero y defender el escudo: Darko
Kovacevic. El legendario delantero pasa revista. “Están aquí para marcar la diferencia”.



A punto de cumplirse el primer mes de competición, las caras nuevas, en su mayoría, están reforzando a la Real. Monreal, Odegaard, Isak y Portu responden. Hay que esperar a Remiro y Sagnan, los dos inéditos.

La voz autorizada por antonomasia para juzgar a un extranjero en la Real es aquel que mejor ha encarnado el dogma: Kovacevic. “No me preguntes si sigo a la Real… ¡Veo todos los partidos!”, expresa con sentido del humor. “Es como mi familia”. Su evaluación general a los foráneos, de momento, es un aprobado. “Están jugando bien, ayudando a que la Real crezca”.

Para cuando Kovacevic defendió a capa y espada y honró, hasta venerarlo, el escudo de la Real, el club se había metido hacía décadas en la época de compaginar cantera y mercado exterior. Nadie del extranjero ha entendido el mensaje como el serbio. “Tienen que aportar lo que no hay en Zubieta”, juzga el exdelantero. “Han pasado un montón y muchos no han rendido”, prosigue.

Máximo goleador en la historia de Anoeta y foráneo con más partidos del club, Kovacevic pone el énfasis en que los de ahora “tienen que dar ejemplo”. Se acuerda de cuando se metió a la afición en el bolsillo para siempre. “Yo pensaba en que me habían fichado y en que estoy aquí para marcar goles”.

“Yo me metía en las pistas”

Carismático a espuertas, competitivo al filo de lo extremo y artillero de raza, Darko
Kovacevic pone nombres y apellidos a los extranjeros que más le están llamando la atención. No se desmarca en exceso de la sensación general: se queda con los escandinavos, Martin
Odegaard y Alexander
Isak.

Sobre el noruego, sensacional en sus primeros compases como realista, Kovacevic afirma que “se nota que ha cogido experiencia durante sus últimos años en Holanda”. A su juicio, Odegaard ha ganado en “confianza” y por ello “juega con madurez” aunque tenga 20 años.

Sobre delanteros sabe y Kovacevic enfoca su mirada a Isak. El balcánico vislumbra “potencial” en el internacional sueco, cuyo primer partido como titular en la Real se saldó con una prometedora actuación contra el Atlético de Madrid.

Kovacevic, una de las estrellas de Anoeta, no se perdió la inauguración del estadio reformado. Bajo su punto de vista, “un campo depende de las personas”. El ariete explica que “ha quedado muy bonito, pero yo siempre me mataba por marcar goles aunque la gente no estuviera tan cerca. Y me metía a las pistas para celebrarlos”, apunta mientras se ríe, antes de cabecear por la escuadra su última predicción, en primera persona: “Hay equipo para que nos metamos en Europa”.


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