Mientras escribo estas líneas todavía quedan un par de horas para que empiece el Atleti-Celta de Vigo
y estoy intentando recordar si alguna vez viví una situación similar en la que el equipo tuviese tantas bajas. Ayer mismo salieron dos positivos más por el maldito virus, Lemar y Herrera
; que se suman a Carrasco, Hermoso, João Félix y Dembelé.
Y sí, lamentablemente tengo un recuerdo de una situación similar, tal vez uno de los peores momentos que viví como colchonero. Creo que los lectores veteranos se acordarán de lo que hablo. Me refiero al inicio de la 1988-89 con Maguregi en el banquillo. Fue un cúmulo de situaciones surrealistas desde el primer minuto.
Para empezar fue la temporada en la que Jesús Gil decidió que yo debía ser capitán con 22 años en un vestuario con 23 españoles. Ya os conté lo complicada que fue la situación hace poco. La pretemporada no pudo empezar mejor, ganando 5-1 al Liverpool y con otras grandes exhibiciones, luciendo un gran fútbol. Éramos los reyes del verano, la prensa nos ponía por los cielos. Éramos los campeones y ni siquiera había empezado el campeonato.
Luego vino la realidad. Primeras cuatro jornadas: tres derrotas y un empate, los últimos de la tabla. Del cielo al infierno en un abrir y cerrar de ojos. Inexplicable. La misma prensa que nos encumbraba ahora nos trataba como jugadores de regional. Un ambiente muy tenso en el vestuario al que se sumó la plaga de las lesiones para la eliminatoria de la antigua UEFA. Y un enfrenamiento público inaudito entre el médico del club, el entrenador y por supuesto el Presi.
Podéis buscar el titular “El Atlético solo tiene 12 jugadores útiles en Groningen”. También encontrareis perlas, como el rumor de que el técnico merengue Leo Beenhakker había preparado informes para nuestro rival. Y declaraciones del fútbol de otros tiempos. A los jóvenes que leáis esto, bienvenidos al Atleti de finales de los 80: “Entre los inscritos por el club para este torneo europeo figuran Setién y Quique, que no están lesionados, pero sí proscritos por Gil: “Estos dos jugadores no vestirán jamás la camiseta del Atlético y los inscribimos para despistar a la prensa”, señaló el presidente.”
Finalmente perdimos 1-0 contra el conjunto holandés. En la vuelta vencimos 2-1, pero fuimos eliminados con el ‘goal-average’. Aquel partido supuso la destitución del entrenador tras 7 partidos oficiales y el despido del médico Enrique Ibáñez, que llevaba 25 años en el club y que acabaría en juicio contra el club.
De ser los reyes de la pretemporada a estar en octubre sin entrenador, eliminados de Europa contra todos los pronósticos y en la cola de la tabla. El ambiente estaba muy tenso, así que acordamos en la plantilla que a partir de ese momento solo hablaría yo con la prensa. El portugués de 22 años. Siempre había sido un chico muy tímido, las ruedas de prensa eran una pesadilla, con los periodistas hurgando en la herida como bien saben. Aquella temporada fue mi “universidad” por todas las tablas que tuve que ganar y aprender en liderazgo y tratar con los medios.
Un recuerdo triste pero que nos recuerda el lema de porque el gran Cholo nos ha llevado a lo más alto: partido a partido. Este fin de semana hemos visto como los dos tiburones no nos van a dar tregua y solo nos queda lo que mejor sabemos hacer: vencer una batalla de cada vez. Mucha fuerza para esta noche. ¡Vamos equipo!
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