El nuevo entrenador del Elche, Pablo Machín, afirmó este jueves, durante su presentación oficial, que el equipo ilicitano tiene mejor plantilla de lo que ha demostrado y confió en poder convencer a los jugadores de su verdadero potencial para lograr la permanencia.
“Este equipo tiene más capacidad de la que ha demostrado y mi trabajo es hacérselo ver”, señaló el entrenador del Elche, cuyo equipo es colista y aún no ha logrado ganar en las 14 jornadas disputadas.
El soriano, tercer entrenador del Elche esta temporada, recordó que ya pasó en sus orígenes como entrenador por situaciones tan críticas como la actual en el Girona y, pese a reconocer que no tiene “la fórmula mágica”, sí precisó que la clave para salir de la cola es “el trabajo y el convencimiento”.
“Mi misión es ayudar al equipo a ser competitivo”, dijo Machín, quien pidió mirar objetivos a corto plazo “porque ya ha habido suficientes frustraciones”.
“Mi único objetivo es que en cada entrenamiento podamos ser un poco mejores”, insistió el soriano, quien valoró el trabajo que realizaron los anteriores entrenadores que han pasado por el banquillo del Elche. “No vamos a poner excusas”, apostilló.
“Se necesita confianza y motivación para que cuando lleguemos al vestuario podamos decir que hemos hecho todo lo que hemos podido”, explicó el técnico, quien afirmó que el equipo ilicitano tiene “mucho margen de mejora”.
“Hay que ser optimistas y no pensar en lo malo, sino en el margen que tenemos”, reiteró el técnico, quien se mostró convencido de que “seguro que de aquí a un tiempo lo vemos todo con otros ojos”.
Machín admitió que el parón de la competición le ha venido bien al equipo a nivel mental “para limpiar fantasmas” y también en el aspecto físico y confió en poder ofrecer ya una mejor imagen en el regreso a la competición ante el Guadalajara en la Copa y el Atlético de Madrid en la Liga.
El preparador admitió que hasta el momento el Elche ha cometido “muchos más errores de los esperados” en la Liga, la mayoría de ellos “individuales que ha pagado el colectivo”.
Machín recordó que el pasado año no fichó ya por el Elche por no dejar “tirado” a su cuerpo técnico en Arabia y dijo que la plantilla del pasado curso era bastante similar, si bien en una situación deportiva menos crítica.
El entrenador se negó a especular con bajas o refuerzos en el mercado de invierno, pero reconoció que en épocas de crisis “siempre tiene que haber cambios”.
“Para mí los jugadores que tengo son los mejores de Primera y los que voy a entrenar. A partir de ahí será la secretaría técnica y el mercado los que digan si podemos traer cosas”, matizó el soriano, quien asumió que afronta un gran reto en su trayectoria profesional.
Además, afirmó que ha evolucionado como técnico y que, pese a que siempre le ha gustado jugar con tres centrales, “los futbolistas y el club están por encima de los entrenadores”.
“No voy a llevar a los jugadores a la guerra sin escudos. Hay que optimizar los recursos para ser competitivos”, explicó Machín, quien deseó que los aficionados se sientan identificados pase lo que pase en el partido con el trabajo de sus jugadores.
El preparador aseguró que se toma el próximo mes de trabajo como una “pretemporada” y dijo que protegerá a los lesionados para que lleguen al reinicio de la competición “en plenitud”.
Machín dijo sentirse “un privilegiado” por entrenar en Primera y afirmó que este regreso a España, tras unos años fuera, es un “escaparate para seguir labrándome una carrera”.
Por último, no quiso entrar en detalles de lo que le ha pasado al equipo para ser colista, pero sí señaló que es “vulnerable en los goles y en la moral”.
“En el fútbol se puede remontar. Que te metan un gol no quiere decir que tengas perdido el partido. Las casas se construyen desde los cimientos. Hay que lograr que no te generen ocasiones y a partir de ahí crecer e ir evolucionando”, concluyó.