“Jugar en un equipo del que eres aficionado es una satisfacción enorme”, esas fueron las palabras de Manu Sánchez el día de su renovación por el Atlético de Madrid hasta el 2023. Pues bien frente a Osasuna cumplió su sueño de debutar en partido oficial con el primer equipo. Y por si fuera poco su actuación fue tan buena que el Metropolitano le despidió con una auténtica ovación cuando abandonó el campo como si fuese un ‘torero’ mientras daba la vuelta al campo, y es que abandonó el terreno de juego por el lado contrario al banquillo para no perder tiempo.
Es habitual verle entrenando a las órdenes de Diego Pablo Simeone, en el filial lo juega todo y brillo este verano en la pretemporada del primer equipo. Un cóctel unido a las molestias de Lodi en el tobillo, que Saúl no termina de encontrarse a gusto de lateral y que el Cholo hace tiempo que descartó a Hermoso en esa demarcación, ha precipitado su debut oficial.
Personalidad, eso demostró sobre el césped del Metropolitano. El madrileño no tuvo problemas en buscar protagonismo y convertirse en un auténtico puñal por su banda, y eso que en su primera subida le robaron el balón. Sin embargo eso lejos de asustarle le hizo crecer. Unos minutos después cayó en fuera de juego después de que Thomas se retrasase uso segundos en lanzarle el balón al espacio, con el africano se le vio en el campo una complicidad especial.
Así que fue creciendo con el paso de los minutos, pasada la media hora dejó un regate y un centro que terminó en saque de esquina por el que se llevó la ovación de toda la afición colchonera. Minutos después provocó la ocasión más peligrosa de los colchoneros en la primera parte con un centro al área que fue cabeceado por Joao Félix y el meta Herrera lo envió con la punta del guante al larguero. Una pena…
En tareas defensivas también estuvo bastante serio y eso que Chimy
Ávila, el delantero de Osasuna más peligroso, cayó mucho a su banda. Sin embargo no le creó problemas. Ni siquiera cuando volvía de incorporarse al ataque donde su velocidad le permitió que no le sorprendiesen. Eso si en el minuto 25 le mostraron una amarilla por cortar una contra que lideraba Ávila.
Quizás por esta tarjeta el Cholo sólo le dio 16 minutos de la segunda mitad. Una segunda mitad en la que volvió a protagonizar una de las mejores ocasiones del partido. Se marchó en velocidad de su par, y eso que le llegó a hacer una carga legal y terminó sacando un pase al área que acabó con una buena ocasión de Correa. Casi marca el 1-0. Justo después el Cholo decidió cambiarle. Puede que haya nacido una estrella.
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