Tras una primera parte para olvidar del Atlético
de
Madrid en Mendizorroza ante el Alavés, Diego
Pablo
Simeone decidió realizar cambios en el descanso y el primer sacrificado fue Marcos
Llorente. De este modo sigue el ‘vía crucis’ de un futbolista que aún no sabe lo que es jugar un partido completo vestido de colchonero. Y eso que en esta ocasión jugó en el campo en el que se lució como cedido para regresar al Real
Madrid.
Hace tiempo que es vox populi que el técnico argentino no termina de contar con Marcos
Llorente. En el partido contra el Alavés le sacó de inicio y después de que el equipo cuajase una mala primera parte le decidió cambiar para dar entrada a Thomas.
Una primera parte en la que el madrileño no terminó de encontrar su sitio junto a Héctor
Herrera. De hecho el mexicano parece que le ha adelantado en los gustos del Cholo en los últimos tiempos. Una participación que se podría haber teñido de tragedia si el colegiado Jaime
Latre hubiese interpretado roja por una fea entrada a Lucas
Pérez por detrás. Por acciones muy similares hay jugadores que fueron expulsados en las primeras jornadas.
Hasta el momento lo cierto es que su participación en el equipo ha ido bajando con el paso de las jornadas. Jugó las cuatro primeras jornadas de Liga (Getafe, Leganés, Eibar y Real
Sociedad). Pero Herrera se estrenó contra la Juve marcando el gol del empate en el descuento y le adelantó en la lucha por los minutos. Desde entonces sólo ha disfrutado de minutos residuales… frente a Mallorca, Real
Madrid y Valencia. Sin contar los 45 minutos en Vitoria.
En total son ocho partidos los que lleva de rojiblanco, repartidos en 233 minutos. A pesar de los escasos minutos el centrocampista ya suma tres amarillas.
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