Más de 40 detenidos y varias toneladas de hachís incautadas, además de armas, embarcaciones y vehículos es el saldo que hasta el momento ha dado una macrooperación contra el tráfico de drogas con epicentro en la provincia de Huelva, según confirman fuentes de la investigación. Desde primera hora 350 agentes de la Guardia Civil, en colaboración con la policía judicial portuguesa y coordinados por la Europol, están realizando varios registros en Huelva y las provincias de Sevilla y Cádiz.
La investigación está siendo dirigida por el juzgado de Instrucción Número 4 de Ayamonte (Huelva) y la Fiscalía Antidroga de Huelva. Entre los detenidos, explican las fuentes consultadas, se encuentran miembros de clanes conocidos de la zona que mueven hachís por la provincia.
De los 25 registros, 20 se han llevado a cabo territorio onubense —Huelva capital, El Rocío, Corrales, Almonte, Aljaraque, Gibraleón, San Juan del Puerto, Rociana o Villablanca y Lepe― y el resto en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), o en Mairena y Villamanrique de la Condesa (Sevilla). El núcleo del operativo estaba radicado en Huelva y el movimiento de la droga llegaba hasta Portugal, lo que explica que la policía judicial del país vecino esté implicada. Las fuentes de la investigación consultadas aún no pueden concretar los vínculos.
La presión de los cuerpos y fuerzas de seguridad sobre el Campo del Gibraltar ha obligado a los narcos del Guadalquivir a diversificar y extender sus rutas de contrabando. Huelva se ha convertido en protagonista en los últimos meses de varias operaciones de la Guardia Civil relacionadas con el tráfico de hachís, un territorio en el que el crimen organizado está en auge. A mediados de febrero, las localidades de Ayamonte, Villablanca y Lepe –también objeto de registros en esta última redada– fueron el escenario de otra macrooperación en la que se detuvo a 13 personas y se desmanteló a una organización que operaba en la costa onubense a nivel internacional.
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