Marcelo y Mendy mantiene su pulso por todo lo alto para hacerse con el puesto de lateral izquierdo del Real Madrid. Si en el reestreno liguero de la competición ante el Eibar le tocó el turno al brasileño, ayer fue el zaguero francés el que fue de la partida contra el Valencia en el Alfredo Di Stéfano.
El ex del Lyon, que ocupó en la jornada anterior el lateral derecho en la segunda parte sustituyendo a Carvajal, fue titular ante el Valencia en su posición más habitual con dos cometidos básicos: frenar las internadas de Ferran Torres en defensa y escoltar a Eden Hazard en ataque. Como ocurrió con el resto de sus compañeros, el francés fue de menos a más y mejoró considerablemente sus prestaciones en la segunda parte.
En la retaguardia selló bien su banda (solo fue regateado una vez en todo el choque), recuperó el balón en cinco ocasiones y poco a poco fue aumentando su frecuencia de incorporaciones, mostrando buena sintonía con Kroos y Hazard. El francés terminó el choque con 57 pases acertados y solo dos fallados y firmando una gran asistencia para el gol de Asensio, que volvió a lo grande tras once meses lesionado.
En el minuto 74, Mendy recibió un saque de esquina botado en corto por Toni Kroos y encaró inmediatamente a Wass antes de rebasar al danés con un cambio de ritmo fulminante para llegar a línea de fondo y poner el centro.
Desde su llegada al Madrid el pasado verano, el carrilero galo ha disputado 1.774 minutos distribuidos en 24 partidos por los 1.586 minutos divididos en 20 choques de Marcelo, que acabó tocado el partido contra el Eibar. Los números tan parejos dan a la razón a la política de rotaciones de Zinedine Zidane (que insiste en cada rueda de prensa en que cuenta con todos) y apuntan a que Mendy es el lateral que más difíciles le ha puesto las cosas a Marcelo, titular indiscutible en la banda izquierda del Madrid desde la marcha de Coentrao.
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