La Secretaría de Relaciones Exteriores informó que el gobierno de México está tomando medidas especiales para cumplir con la entrega de agua del Río Bravo a Estados Unidos, como lo marca el Tratado de Aguas de 1944 y las Actas 234 y 331.
En una nota informativa difundida la noche del domingo, detalló que las entregas se harán en función de la cantidad de agua disponible en la cuenca mexicana del río.
La dependencia señaló que entre las “acciones extraordinarias” para cumplir con el tratado está prevista la entrega de volúmenes de agua provenientes del Río San Juan, en Nuevo León -donde se ubica la presa ‘El Cuchillo’-, las cuales se realizarán considerando las limitaciones operativas del sistema hidráulico mexicano.
Además, la SRE precisó que se privilegiará el uso agrícola en México y se dará prioridad al consumo humano.
“Las entregas a los Estados Unidos se realizarán cuando exista disponibilidad operativa en el sistema hidráulico mexicano dando prioridad al consumo humano”, señaló.
La SRE recordó que recurrir al Río San Juan para cumplir con los compromisos de entrega de agua del Río Bravo no es una medida nueva, pues esta fuente ya ha sido utilizada en el pasado con ese fin, con base en lo dispuesto en el Artículo 9 del Tratado de Aguas de 1944 y en el Acta 331 de la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA).
La Secretaría subrayó que el Gobierno de México mantiene un seguimiento constante de los compromisos establecidos en el Tratado y que estas acciones se realizan en coordinación y diálogo con los usuarios de la cuenca mexicana del Río Bravo.
En ese sentido, reiteró que “es prioridad garantizar el agua para consumo humano de las poblaciones mexicanas que dependen de estas fuentes”.
Desde las primeras horas del viernes, México inició el pago parcial de la deuda de agua que mantiene con Estados Unidos. La ‘Presa La Amistad’, ubicada en Acuña, en el estado de Coahuila, frontera con Texas, incrementó sus extracciones de 33 a 122 metros cúbicos por segundo, informó la jefatura de operación del embalse a medios locales.
El inicio de estas entregas se da tras la presión del gobierno de Estados Unidos, luego de que el presidente Donald Trump exigiera el cumplimiento del compromiso.
Foto: Archivo Reuters
El Gobierno de México sostuvo que las entregas se realizarían en estricto apego al tratado, el cual contempla ciclos de cinco años para compensar faltantes derivados de sequías extraordinarias. Durante el ciclo 2020-2025, las condiciones de sequía impidieron cubrir la cuota completa, por lo que México dispone de un periodo adicional hasta 2030 para saldar el adeudo.
Recientemente, ambos países acordaron liberar un volumen de 249 millones de metros cúbicos, gracias a las lluvias recientes, pero sin afectar el abasto de agua para consumo humano ni para la agricultura.
Asimismo, el gobierno mexicano destacó la implementación de proyectos de tecnificación y conservación en distritos de riego de Tamaulipas y Chihuahua, para optimizar la gestión del recurso en beneficio de la población fronteriza.
México y Estados Unidos continuarán coordinando la entrega de agua durante este ciclo, cuya planificación final se definirá antes del 31 de enero de 2026.
