“Mi postura es que el Ejecutivo no persiga, que mi fuerte no es la venganza”, dijo. No obstante, anotó que los ciudadanos pueden reunir firmas para una consulta que tenga como fin enjuiciar a expresidentes.
Tras la detención del exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya, el presidente Andrés Manuel López Obrador fue interrogado sobre una posible investigación a su antecesor, Enrique Peña Nieto. Ante esto, dijo que “todas las investigaciones que están en curso no pueden limitarse, tienen que llevarse a cabo con amplitud y deben de ir al fondo”.
“Nosotros no podríamos en el Ejecutivo decir esto sí, esto no o en esta investigación, quédate solo con los más desacreditados o los que no tienen tanta influencia o a los que se pueden convertir en chivos expiatorios. Eso no lo vamos a hacer, no sería justo ni democrático”, afirmó durante la conferencia de prensa.
No obstante, reiteró lo dicho en su toma de posesión respecto a que no iba a presentar denuncias contra expresidentes.
“Lo que yo plantee, no es ningún pacto secreto. Lo dije en mi toma de posesión y lo repito es que nosotros no íbamos a presentar denuncias contra expresidentes. Que considerábamos que teníamos que ver hacia adelante y no quedarnos anclados en el pasado, que lo más importante era la condena al régimen neoliberal, de corrupción”, apuntó.
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“Que los que llegábamos tenemos que ajustarnos a las nuevas reglas, a que no podemos actuar de manera ilegal y a cometer actos de corrupción y se termina la impunidad”, añadió.
Recordó que en diciembre presentó ante el Senado una propuesta para reformar el artículo 108 constitucional y quitar así el fuero del presidente para que pudiera ser juzgado por delitos de traición a la patria y otros delitos graves. No obstante esta no fue avalada.
“Estoy enviando de nuevo la iniciativa para no quede ninguna duda porque no se aprobó la reforma al 108 porque decía que al presidente se le podía juzgar por traición a la patria y otros delitos graves como corrupción, pero se dejaba afuera cualquier otro delito y se podía interpretar que al presidente no se le podía juzgar. Estoy enviando iniciativa que dice que al presidente se le puede juzgar por cualquier delito como cualquier otro ciudadano”, refirió.
Precisó que nunca en la historia de México se ha juzgado a un presidente por corrupción, por lo que este es un tema que debe ser tratado por constitucionalistas y abogados “porque existe esa impunidad en la Constitución, algo que no sucede en otros países”.
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“Mi postura es que el Ejecutivo no persiga, que mi fuerte no es la venganza”; sin embargo, dijo que esto se llevaría a cabo si los ciudadanos reúnen firmas y dicen que se proceda contra expresidentes desde Carlos Salinas de Gortari a la fecha.