El alcalde de Nueva York, Eric Adams, emitió una declaratoria de emergencia por la crisis humanitaria de solicitantes de asilo, después de que los estados sureños de EU enviaran miles de migrantes en autobús a la ciudad.
“La ciudad de Nueva York se ve obligada a soportar mucho más de lo que le corresponde en una crisis nacional provocada por motivaciones políticas”, denunció el mandatario en un mensaje a través de redes sociales.
Desde abril, miles de solicitantes de asilo han sido enviados en bus desde los estados fronterizos de Texas y Arizona hacia Washington, Nueva York y Chicago, en una disputa política sobre la seguridad fronteriza.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, un republicano que busca la reelección en noviembre, ha transportado en autobús a más de 11 mil a dichas ciudades, acciones criticadas por los demócratas.
Tan solo la ciudad fronteriza de El Paso ha llevado por tierra a unos 7 mil inmigrantes a NY desde finales de agosto y ha enviado a más de mil 800 a Chicago. Este jueves, nuevos camiones salieron de dicha localidad hacia estas ciudades.
El gobierno del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y los alcaldes demócratas que reciben a las personas han criticado a los gobernadores republicanos, ya que afirman que estas campañas agotan los recursos.
El pasado 22 de septiembre, el gobierno neoyorkino anunció que abriría nuevos centros de emergencia para albergar a las personas desplazadas. Sin embargo, este viernes, el gobernador sostuvo que los refugios están casi al 100% de su capacidad y llegan en promedio 5 a 6 autobuses por día.
De acuerdo con el funcionario, desde abril de este año, alrededor de 17 mil migrantes han sido transportados por tierra a la ciudad desde la frontera sur del país y afirmó que este viernes NY superará el número más alto de solicitantes de asilo en la historia registrada en su sistema de refugio que han llegado a la ciudad.
“La ciudad de Nueva York ya ha hecho más que casi cualquier otra ciudad para apoyar este influjo de solicitantes de asilo”, declaró durante una conferencia de prensa, al tiempo que denunció que no han recibido el apoyo necesario.
Ante esto, el alcalde pidió ayuda federal y estatal. Afirmó que son necesarias legislaciones que permitan a estos grupos trabajar legalmente “ahora, no en seis meses” y así como un esfuerzo coordinado para moverlos a otras ciudades en el país “para asegurarse que todos están haciendo su parte”.
Por último, demandó una reforma migratoria para ofrecer un “camino seguro y legal al sueño americano”.
(Con información de Reuters)
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