La feroz ola de calor que está sufriendo gran parte de Estados Unidos también reactivará la inflación porque las centrales eléctricas están devorando el combustible -carbón y gas- para mantener los aparatos de aire acondicionado en funcionamiento y tan sólo en julio, los futuros del gas natural subieron un 48%.
De esta manera, el récord de calor está elevando los precios del gas natural y revirtiendo la caída del mes pasado, lo cual impactará en la inflación, que en junio se aceleró al 9,1% lo que constituyó el mayor incremento desde 1981.
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100 MILLONES DE PERSONAS EN PELIGRO POR EL CALOR
Las autoridades advirtieron que más de 100 millones de estadounidenses están en el corredor por donde avanza una peligrosa ola de calor que va del oeste hacia el noreste del país, con temperaturas sobre los 38 grados centígrados desde Arizona hasta Luisiana, indicó ayer el Servicio Meteorológico Nacional.
Mientras que Boston declaró la emergencia por calor, Connecticut activó el “protocolo de clima extremo” del estado, Texas registra 43 grados en varias partes del estado, y la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, advirtió a los residentes que se queden en casa por el calor y la humedad.
Un modelo de previsión que siguen los operadores de gas predice que esta semana y la próxima serán las más calurosas de las últimas cuatro décadas.
Las temperaturas en el estado de Texas rondaban los 43 grados esta semana – BLOOMBERG
A su vez analistas evalúan que la demanda podría impedir que se almacene suficiente combustible para el invierno y aumentar el riesgo de subidas de precios y escasez cuando se necesite el gas para la calefacción.
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La caída de los precios de las materias primas alentó las esperanzas de que la inflación haya tocado techo, pero la ola de calor, que abarca a casi todo el país y se prevé que se prolongue hasta agosto, amenaza con hacer subir de nuevo los precios de las principales materias primas.
Además, la cosecha de maíz estadounidense está en su fase de polinización, cuando el calor elevado y la baja humedad pueden reducir el rendimiento y contribuir al aumento de los precios de los productos básicos, desde el combustible hasta la carne picada, evaluó el Wall Street Journal.
El carbón y el gas son muy demandados ahora por los productores de energía que luchan por generar suficiente electricidad para sostener el funcionamiento de los aires acondicionados – BLOOMBERG
A su vez, el encarecimiento del gas natural no sólo aumenta el costo de bajar el termostato, sino también el de fabricar fertilizantes, acero, cemento, plástico y vidrio.
Los precios del gas natural subieron este año porque la demanda de las empresas de servicios públicos, los fabricantes y los compradores extranjeros, especialmente en Europa y en vistas de la guerra Rusia-Ucrania, superó el crecimiento de la oferta y mantuvo los inventarios muy por debajo de lo normal.
Ante la escasez de operarios y equipos de perforación, y centrados más en el bombeo de dividendos que en el aumento de la producción, los perforadores mantuvieron en general una producción estable.
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