El técnico del Celta Óscar García debe estar rezando a todas las ‘meigas’ habidas y por haber para que Rubén Blanco no sufra ningún percance próximamente al ser el único de los tres porteros de la primera plantilla del Celta disponible para su técnico.
Su compañero Sergio Álvarez, que jugó ante el Villarreal y frente al Valladolid precisamente al estar de baja el mencionado Rubén Blanco se retiró del entrenamiento de este miércoles y las pruebas realizadas a posteriori confirmaron que sufre una lesión en su rodilla izquierda por la que se perderá, como mínimo, los tres partidos que tiene que disputar el Celta en lo que resta de 2019: contra Mallorca y Levante en Liga y frente al Peña Azagresa en Copa del Rey.
Se da la circunstancia de que, estando el Celta como está en puestos de descenso, los encuentros ante los bermellones y los granota son de vita importancia en su intento de salir del pozo, y es por ello que una hipotética lesión de Rubén Blanco sería un grave contratiempo.
Iván Villar está lesionado
De producirse, tendría que ser uno de los porteros del filial quien defendiese el arco celeste ya que Iván Villar, el tercer guardameta a priori, todavía está convaleciente por una rotura del menisco externo de su rodilla izquierda.
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