Si para alguien es especial el partido de este domingo del Celta contra el Barça es para Óscar Mingueza. El canterano azulgrana volverá a pisar el Camp Nou, esta vez como rival, aunque no precisamente en su mejor momento, tal como indican sus cifras esta temporada.
El defensa se reencontrará con los que eran sus compañeros hasta hace apenas dos meses, ya que puso rumbo a Vigo el pasado agosto, sin estar jugando el catalán tanto como esperaba. Así lo indican las cifras: en las siete primeras jornadas de Liga solo ha disputado 27 minutos, muy alejado de los 225 minutos que acumulaba la pasada campaña a esta altura del campeonato.
No está teniendo Mingueza el protagonismo deseado en el Celta, donde juega menos que en el Barça, aunque espera el jugador que pronto se revierta esta situación y vuelva a contar con oportunidades para mostrar su mejor versión.
Y es que en apenas un año, el defensa ha pasado de ser titular con el equipo de Ronald Koeman a ejercer de suplente con el técnico Eduardo Coudet. “Mi decisión fue clara cuando me dijeron que tenía que salir porque no iba a jugar casi nada”, explicó el futbolista de 23 años, quien sigue a la espera de ganarse la confianza de su entrenador