Probablemente según baje del autobús de la Real este domingo para acceder al RCDE Stadium a Mikel Oyarzabal se le acumulará en la cabeza una imagen. La suya celebrando un gol con el dorsal 28 a la espalda. Ha quemado etapas a tal velocidad que parece que han tenido que transcurrir muchos más años desde aquella tarde hasta esta semana. En la que se presentará en el escenario en el que marcó su primer gol en la elite con el brazalete de capitán en el brazo y el ‘10’ a la espalda. Sólo han transcurrido 3 años 7 meses y 10 días desde aquel 8 de febrero de 2016 en el que el guipuzcoano hizo el tercero de los cinco tantos que la Real le endosó al Espanyol en una noche para el recuerdo.
Su primer socio en el primer equipo fue Rubén Pardo. El riojano cambió la orientación del juego, Mikel recibió en el borde del área y fue hacia adentro. Pardo le ofreció el apoyo en la media luna y tras trazar con él una perfecta pared, el de Eibar se quedó solo ante Pau López para batirle con frialdad y marcar su primer gol en Primera División. Para entonces ya se había ganado un puesto en la alineación de Eusebio Sacristán. Debutaría en la Real aún con Moyes, el 25 de octubre de 2015, pero su primera titularidad sería una semana antes de aquel choque en Cornellà, el día 30 de enero de 2016.
Desde aquel estreno en el ‘once’, Mikel Oyarzabal ha disputado 134 de los 141 encuentros de Liga que ha jugado la Real y sólo ha sido suplente en 13 de ellos. Ha sido indispensable para Eusebio, Imanol y Garitano y no empieza un duelo en el banquillo desde el 14 de enero de este año.
Cornellá, inicio de algo grande
Su idilio con el gol, como decíamos, comenzó en Cornellà, pero sólo una semana después, ante el Granada, se estrenaría en Anoeta con el segundo doblete más precoz de la historia de la Real. En una semana metió los tres primeros de los 39 goles que ha celebrado vestido de txuri urdin.
Los ha celebrado en todas las campañas y en todas las competiciones. Lleva cinco campañas consecutivas haciendo goles. En la de su debut, la 15/16 se fue hasta 6. En la siguiente se quedó en 4, dos en Liga y dos en Copa y desde la 17/18 va superándose.
En el citado curso, marcó 13 en Liga y 2 en Europa League para un total de 14. La pasada campaña anotó 13 en la competición doméstica y uno en Copa, igualando su récord personal de 14 tantos en una sola campaña. Esta temporada ya se ha estrenado, al marcar de penalti en Mestalla.
Desde aquel 8 de febrero de 2016 en el que el de Eibar abrió su cuenta goleadora, sólo un futbolista ha marcado más goles vestido de azul y blanco: Willian José. El brasileño tiene además el mérito de haberlos hecho en menos tiempo, puesto que llegó a la Real en verano de 2016. El de Porto Calvo lleva 45 goles desde su fichaje.
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